Hay que tener muy en cuenta el deseo sexual en la tercera edad, asegura Don Juan Casanova

Pasan los años, llegan las canas, pero no necesariamente esa debe ser una señal para que las parejas de la tercera edad deban apagar la llama de la pasión. El otro día le leí a la sicóloga Anna Freixas que la sexualidad en la madurez es una experiencia múltiple y diversa, en la que no hay reglas.

Indica la especialista que las mujeres entre 50 y 83 años, heterosexuales, bisexuales y lesbianas, que hablan sobre sus deseos y evalúan su propia experiencia erótica, evidencian que la sexualidad en la madurez es una experiencia múltiple y diversa, en la que no hay reglas.

“El deseo es el deseo, antes y después del cese de la menstruación, así que no hay un deseo ‘x’ antes de la menopausia y un deseo ‘y’ después de la misma”, explicó Freixas al ser consultada sobre la sexualiad de las personas de la tercera edad.

Razón por la cual las parejas mayores deben mantener un diálogo abierto y claro para poder disfrutar de la compañía del otro. Los factores a tener en cuenta deben ser las posiciones que más les generen placer y cuáles pueden hacer por sus problemas físicos.

Otros colegas también señalan que tener cantidades moderadas de sexo podrían beneficiar la salud de los hombres de la tercera edad, pero hacerlo demasiado frecuentemente podría ser un factor de riesgo para su salud cardiovascular.

Por eso, es recomendable que visiten a un médico para que realice los chequeos necesarios. Así que mi recomendación es que todos realicen actividades placenteras como ir a nadar, bailar o caminar en la playa. La estimulación puede ser de muchas maneras y lo importante es disfrutar del momento.