Una de las preguntas más frecuentes que me hacen por el correo electrónico —y en persona también— es ¿cómo hacer para durar más tiempo antes de eyacular, qué posiciones practicar?
Resulta difícil generalizar para dar a grandes rasgos las pautas para tardar un poquito más en acabar, pero también es tedioso tener que analizar caso por caso para saber el porqué eyacula muy rápido. Por eso me he tomado el atrevimiento de investigar y cotejar con mi experiencia en la cama, sobre las posiciones que ayudan a alargar el coito. Estas son algunas:
La cucharita
Expertos aseguran que, aunque la penetración inicial en esta postura puede ser un poco difícil, “es totalmente factible y vale la pena”. Ambos mirando en la misma dirección, la pelvis de la mujer debe estar algo más arriba, con la cadera inclinada hacia delante y las piernas flexionadas para ayudar a que sea más fácil la penetración.
Una vez encajados y acurrucados, la mayor parte de la acción dependerá del hombre, que puede aprovechar la posición para rodear con sus brazos a la mujer y excitarla de otras maneras adicionales y conseguir un impulso adicional. La idea es igualar y coordinar los movimientos y que haya mucho contacto físico cuerpo con cuerpo.
La cruz
El hombre tumbado de lado y la mujer recostada boca arriba en perpendicular cubriendo con sus piernas la pelvis de él. Como si el cuerpo de ella surgiese desde la cadera de él. Una postura que permite una movilidad reducida y una penetración poco profunda. Él puede moverse hacia delante o hacia atrás sosteniendo las piernas de ella. Al tener el cuerpo de la mujer encima se limitan los movimientos de él por lo que la efusividad queda controlada.
Sentados en la cama (ella encima)
Ambos sentados, ella rodeará con sus piernas la espalda de él hasta que su pelvis encaje y se produzca la penetración. Libertad total de los brazos en esta postura que pueden servir para abrazar a la otra persona y sentir un mayor contacto físico.
En una silla (ella encima y de espaldas)
En un sofá o silla, la mujer se sienta sobre el hombre dándole la espalda con el trasero sobre su regazo. Ella debe inclinarse hacia delante para llevar a cabo la penetración.