¿Es el ‘Monstruo de la Loma’ un depredador sexual en serie?
Al Día conoció detalles de la captura de Víctor Martínez Ramos, investigado por el abuso sexual de una menor de 9 años, en La Libertad. El hoy imputado aceptó los cargos de acceso carnal violento y hurto.
Fue bautizado por las autoridades debido al sector accidentado en el que fue encontrado, y por supuesto por el hecho por el cual era buscado. Víctor Andrés Martínez Ramos, de 28 años, conocido como el ‘Monstruo de la Loma’, fue capturado en un “tiempo record” de ocho días, luego de ser buscado por su vinculación en el caso de abuso sexual de una menor de 9 años, en el barrio La Libertad, de Barranquilla, ocurrido el pasado 7 de junio.
Al hombre, quien fue capturado por el CTI de la Fiscalía y la Policía de Infancia y Adolescencia en el sector de Loma Roja, un fiscal especializado le imputó los cargos de acceso carnal violento agravado y hurto, mismos que aceptó.
Sin embargo, una de las líneas investigativas que tiene el ente acusador en su carpeta es la de que el individuo supuestamente puede estar involucrado en otros hechos de la misma índole. “Existe la posibilidad de que no sea su primer evento sexual, por la connotación, por el grado de descomposición mental que tenga esta persona, no es para nada inimputable, porque está plenamente consciente de lo que hace, pero es un individuo, por ser consumidor, no tiene los límites definidos”, indicó un investigador del CTI a AL DÍA
En esa misma línea, el detective manifestó que se encuentran analizando otros casos que tienen un patrón criminal muy parecido, tanto en el sector como en otros lugares, para así determinar si se trata de la misma persona.
Sobre esto, desde Barranquilla el fiscal General, Francisco Barbosa, manifestó que se investiga si este individuo sería un “depredador sexual”. “Se investiga si estamos frente a un depredador sexual que estaría involucrado en otros asaltos”, dijo
Fueron siete días para dar con la identidad de Martínez Ramos. Una investigación que los mismos miembros de la Policía Judicial manifiestan empezó desde cero: “Estábamos a ciegas. Pero fue clave esperar con cautela la entrevista con la pequeña, esperamos a que se estabilizara para hablar con ella”, manifestó la fuente.
El miembro del ente acusador declaró que la parte técnica fue importante: “El recaudo de cámaras, análisis de videos, luces forenses, evidencia biológica. Desde allí evidenciamos que había una persona que ingresaba al sector, duraba mucho tiempo y luego salía”.
Los detectives comenzaron a analizar y las hipótesis surgieron, así como los sospechosos “Surgieron hipótesis diferentes. Tuvimos muchas aristas, las cuales íbamos descartando. Tuvimos potenciales indiciados que también se fueron descartando. Empezamos a trabajar con diferentes fuentes, apoyados con la Policía de Infancia y Adolescencia, y con la gente, quienes estuvieron muy pendientes del caso. A los siete días ya el hombre estaba identificado y capturado a los ocho, todo con ayuda de los cotejos morfológicos y cotejos de prendas”.
Fue en medio de una diligencia de allanamiento que revalidaron las sospechas que tenían sobre su participación en el atroz hecho: “Hicimos un allanamiento y allí encontramos precisamente las mismas prendas con las que aparecía en el video, estas estaban rasgadas y medio ocultas. Encontramos la tablet de la niña que había robado, así como el reloj de un hermano de la menor”.