Aida Merlano está siendo trasladada hacia el batallón militar en Malambo
El Inpec confirmó que la excongresita se encuentra viajando hacia Barranquilla para ser recluida en el Batallón Vergara y Velasco.
El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) confirmó que ya comenzó el traslado de la excongresista Aida Merlano desde la cárcel El Buen Pastor, en Bogotá, hacia el batallón militar Vergara y Velasco, en el municipio de Malambo, Atlántico.
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Todo parece indicar que el inminente traslado se daría en horas de la tarde de este domingo 18 de junio y se espera que Merlano, quien paga una condena por corrupción electoral, arribe a Catam para abordar un avión de la Policía Nacional y aterrizar, probablemente en Cacom, la base militar del municipio de Malambo.
El abogado Miguel Ángel del Río aseguró en diálogo con Noticias Caracol que se solicitó al Ministerio de Defensa, de Justicia, al Inpec la protección de Merlano tras amenazas recientes que ha recibido en El Buen Pastor, y la respuesta por parte de las entidades fue positiva.
Este medio conoció que los abogados de Merlano habían solicitado al Instituto un cupo en un establecimiento de reclusión de Barranquilla, a raíz de amenazas y de un supuesto plan para atentar en su contra dentro de las instalaciones del reclusorio para mujeres El Buen Pastor de Bogotá, por lo que se obtuvo o se consiguió que esta sea trasladada al Batallón de Ingenieros Vergara y Velasco del municipio de Malambo.
Vale mencionar que en mayo, el abogado Miguel Ángel del Río y la propia Merlano denunciaron sobre un supuesto plan para atentar en su contra dentro de las instalaciones del reclusorio para mujeres. Según el dato, Merlano habría recibido una llamada en el teléfono del patio 9 del penal en la que le advertían de una mujer llamada Tatiana Toro que, supuestamente, fue contratada para acabar con su vida.
Ante la denuncia interpuesta en Fiscalía el día 10 de mayo, el Inpec entregó unas recomendaciones para la protección de la privada de la libertad. En ese sentido, según la comunicación, el personal del cuerpo de custodia y vigilancia, en especial comandantes de pabellón, debían tener identificada a Merlano y conocer de su situación jurídica, así como “verificar constantemente la seguridad y presencia mediante revistas, en especial al iniciar y al culminar las visitas los fines de semana”. Además, dijo el Instituto que debía “disponer de un esquema de seguridad ajustado al perfil para los desplazamientos que deban realizarse (Citas médicas, diligencias judiciales y traslados)”
