La violencia sigue rondando en el Fútbol Profesional Colombiano. Así quedó evidenciado con el ataque a piedra contra los 19 buses que transportaban a los más de 700 aficionados que acompañaron al Junior en la conquista de su novena estrella en el estadio Nemesio Camacho El Campín ante Deportivo Pasto.
A su llegada a Barranquilla, varios aficionados hablaron con AL DÍA y dieron a conocer detalles del ataque, que se registró en horas de la noche del pasado miércoles a la altura de la calle 80, en el noroccidente de la capital del país.
Uno de los seguidores del ‘Tiburón’, quien pidió la reserva de su identidad, puso de presente que los atacantes vestían camisetas de Millonarios e Independiente Santa Fe.
“La caravana ya había salido del estadio y de un momento a otro nos empezaron a atacar a piedras. Vivimos momentos de pánico al interior de los buses”, indicó.
El hombre aseguró, además, que los atacantes se encontraban en diferentes puntos de la carretera, con el objetivo de impedir su paso.
Por esa razón, un grupo de viajeros tomó la decisión de bajarse de los vehículos para enfrentarse a los desconocidos.
“Ellos trataron de evitar que siguieran partiendo los vidrios, en el interior había mujeres y personas mayores que podían resultar lesionadas”, relató.
Asimismo, un integrante del Frente Rojiblanco Sur (Frbs) denunció que uniformados del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) fueron “participes” del ataque a la ‘caravana juniorista’.
“En vez de ayudarnos, se dedicaron a golpearnos y permitían que nos siguieran atacando. Ellos llegaron agresivos, incluso le partieron la cabeza a varias personas”, sostuvo.
Asimismo, criticó la actitud por parte de los uniformados de la Policía Nacional: “A nosotros nos atacaron porque ellos nos dejaron solos, sabían el riesgo que corríamos pero no les importó”.
Al final, el aficionado puso de presente que los lesionados fueron atendidos minutos después por un grupo de médicos en un peaje ubicado en la vía que comunica a Bogotá con la costa Caribe.