Dice un adagio popular que la traición más dolorosa proviene siempre de un amigo, y esto fue lo que sucedió en el municipio de Arjona, a las 5:00 de la tarde del lunes, cuando un joven fue asesinado por un supuesto amigo quien le propinó un disparo, en Arjona, Bolívar.
El joven identificado como Jorge Leonardo Matos Paternina, de 22 años, había regresado el pasado domingo a casa de su mamá en el barrio San José de Turbaquito para darle la buena noticia a sus familiares de que en Turbaná ya había conseguido un trabajo como albañil en una obra.
La víctima se encontró con un amigo de infancia conocido por ellos como ‘Wilmitar’, a quien Jorge le había prestado unas gafas días atrás.
Sin embargo, cuando el hoy occiso le pidió a su amigo que le devolviera las gafas, al parecer, a ‘Wilmitar’no le gustó esto y se ofendió según los familiares.
Fue entonces cuando desde la mañana del lunes, el presunto asesino estaba convidando a pelear a Jorge porque no quería devolverle las gafas. “Ese pelao estaba borracho, porque tenía varios días bebiendo”, afirmó Magovis Paternina, madre del joven asesinado.
En la tarde, cuando Jorge estaba jugando ludo con unos amigos, llegó el presunto asesino y le preguntó “¿estás listo para pelear?”, a lo que supuestamente el hoy fallecido se negó y decidió coger una moto para ir a su casa, pero ‘Wilmitar’ lo agarró y lo tumbó de está cayendo en un charco.
En ese momento, el que en otrora era amigo de Jorge, le propinó un balazo en la frente y posteriormente huyó del lugar con rumbo desconocido.
Por su parte, los vecinos que vieron lo sucedido, auxiliaron al joven y lo trasladaron hasta el hospital local de Arjona, donde, según los parientes del occiso, no le brindaron los primeros auxilios, sino que lo remitieron hasta la clínica Madre Bernarda, pero lastimosamente, Jorge murió en el camino, por lo que fue llevado de inmediato hasta la morgue de Medicina Legal en Cartagena.
ERAN AMIGOS DE INFANCIA
Jorge Leonardo y ‘Wilmitar’, señalado como el presunto asesino del primero, se conocían desde niños, cuando ambas familias vivían en el barrio La Quinta en Cartagena, pero por cosas del destino terminaron viviendo en Arjona y el final de la amistad fue marcada por la trágica muerte del segundo de siete hermanos.