El compromiso de todos por un Día de la Madre en armonía

Hoy se conmemora en Colombia el Día de la Madre, uno de los más importantes del calendario festivo del año por la celebración que representa, pero al mismo tiempo es una fecha incluida por las autoridades entre las tres más violentas cada 12 meses en el país.

En el país se promueven campañas previas con el fin de bajar los índices de riñas y homicidios, por desarrollar un fin de semana tranquilo y sin desenlaces trágicos, como el sucedido la madrugada del lunes 14 de mayo de 2018, cuando el expolicía Brayan de Jesús Tuirán Cabrera fue asesinado tras celebrar el Día de la Madre.

Brayan de Jesús, acompañado por su compañera sentimental, visitó a su mamá en el barrio Villa Murillo (Soledad). Ingirió alcohol durante la tarde y noche; después de la medianoche, su progenitora lo llevó a él y su nuera hasta la vivienda de ellos, en Ciudad Caribe (Malambo).

De la nada y sumidos en el licor, tras un comentario mal interpretado entre ambos, Tuirán y Muñoz se trenzaron en una riña en la que se lesionaron con armas blancas.

En vista de que su pareja no aparecía, la esposa de Tuirán salió a buscarlo al estadero, donde lo encontró ensangrentado. Por su parte, al enterarse que a su hermano lo habían herido, Breiner Muñoz apareció en escena con un revólver.

“A mi hijo me lo mataron unas cuadras antes de llegar a su casa. Me le dieron cuatro balazos por la espalda”, contó Isabel Cabrera, ahogada en el llanto tras pasar un domingo de ensueño con su familia.

Para que episodios como este no se repitan es que las autoridades reiteran el llamado a la armonía y la tranquilidad en las celebraciones que se van a dar hoy.

“Este día, que por lo general es un domingo, o así lo ha establecido el comercio, en los establecimientos se venden muchas más bebidas alcohólicas para festejar; y las personas van y comparten allí también, ya cuando estas bebidas están de por medio al ser humano se le es difícil razonar y tolerar situaciones del ambiente, lo que desata también este fenómeno social”, explicó para AL DÍA la socióloga Maira Orozco.

“Otra causa de esta violencia en el Día de la Madre es la falta de respeto por la figura materna, que a pesar de ser “su día” existan rencillas pasadas entre la familia o amistades, sin importarles garantizar el bienestar de ellas”, continuó la profesional.

DÍA DE LA MADRE EN CIFRAS

“A nivel Nacional la Policía se alista para afrontar esta fecha, una de las más violentas por hechos que surgen de la intolerancia. Estamos generando campañas de prevención, invitando a que todos participen en la cruzada, cero lesiones, cero pérdidas de vida, estadísticas favorables en reconciliaciones y se engrandezca a las madres”, explicó para AL DÍA el general Mariano Botero Coy, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla (Mebar).

Según estadísticas de la Mebar, los homicidios en el Día de la Madre han ido en aumento. En 2015 sucedieron dos asesinatos, mientras que en 2016, 2017 y 2018 aumentó en un 100 %.

Rubén Darío Acosta Ortiz, director del Centro de Estudios Socio Jurídicos Latinoamericanos (Cesjul) y abogado penalista, cree que hay muchos factores en torno a las relaciones familiares que hacen que la festividad tenga altos índices de violencia.

“La mamá es parte fundamental de la sociedad, es quien genera unidad. Entonces, el Día de la Madre es visto como una competencia: ¿quién es mejor?, ¿quién le da más gusto?, y eso, inevitablemente, va a generar conflictos”, señaló el experto para El Tiempo.

Contrario a los hechos mortales, las riñas en Barranquilla y su Área Metropolitana vienen en descenso. En 2015 se reportaron 868 riñas, luego bajaron en 2016 (572), 2017 (476) y 2018 (377).
Las riñas en su mayoría son derivadas del consumo de alcohol y drogas, pero sobre todo el primero en mención.

EL DESBORDADO CONSUMO DE ALCOHOL

La primera causa de toda esta situación es sin duda el consumo desbordado de alcohol.

“Una de las bebidas alcohólicas más consumidas en los trópicos, es el Aguardiente ( Agua- caliente). E ingiriéndolo sin control en fiestas populares, como lo es el tradicional Día de las Madres, tantos vivas como difuntas se desatan estas conductas violentas”, manifiesta el abogado y periodista Gaspar Hernández Caamaño.

Según el profesional, “el aguardiente quema las neuronas y como todo alcohol invade el hipotálamo y en poco tiempo convierte, al manso hijo y al adolorido pariente, en una descontrolada ‘fiera’ poseída de llanto, desolación y borrachera desaforada. He ahí, el ingrediente social por qué en esas apasionadas celebraciones, las estadísticas de hechos de violencia, como riñas, lesiones, irrespeto y muertes, aumentan, no solo entre nosotros, caribeños fiesteros, sino en muchos pueblos latino”.

El amor de madre y a las madres debe ser un regocijo humilde que se brinde con una cerveza, una copa de vino o un escocés suave y de mayoría de edad.