En una cárcel podría terminar hoy Jorge Armando Rodríguez Ayala, 33 años, quien fue capturado por la Policía Metropolitana de Barranquilla a raíz de una denuncia que presentaron los padres de una niña de 11 años, quien el pasado martes empezó a recibir mensajes sexuales que el capturado le enviaba a las redes sociales y al Whatsapp.
Rodríguez Ayala fue detenido el pasado viernes gracias a una hábil trampa que le tendieron los papás de la niña con el apoyo de la Policía: lo citaron cerca a la Institución Educativa Distrital Simón Bolívar, para un supuesto encuentro personal y el presunto depravado cayó.
Al requisarlo los uniformados le encontraron, dentro de un bolso, una muda de ropa, tijeras, guantes, vaselina y varios chips de celular, los cuales están siendo analizados por los técnicos de la Fiscalía.
“El proceso de judicialización fue complicado, pero finalmente legalizaron la captura y hoy será presentado de nuevo ante el Juez para la audiencia de solicitud de medida de aseguramiento, por delito de demanda de explotación sexual y comercial con menor de 18 años, que tiene una pena de hasta 30 años de cárcel”, informó una fuente judicial consultada.
Las pruebas
La Fiscalía tiene chats, videos y fotos que demostrarían el acoso sexual que Rodríguez Ayala ejerció contra la niña, a quien invitaba de manera obsesiva a sostener relaciones sexuales a cambio de dinero y ropa.
Entre el material probatorio destacan varios videos cortos en los que el presunto depravado aparece semidesnudo haciendo gestos y pronunciando el nombre de la menor de una forma que a él le debió parecer ‘erótica’.
Uno de los chats dice:
Jorge Rodríguez:Me llamó Juan José.
Me pregunto que si te interesa salir.
Podría darte 600 mil pesos.
¿Puedes ahora?
Víctima: ¿Quién te dio mi número?
Sofía, una amiga tuya.
Víctima:Si, mándame una foto.
Listo, pero te enviaré una de lo que vas a meter también.
En otro:
Conóceme entonces.
Pero no creo que tengas @2.
Te pasaré 200.000 y te buscaré clientes.
Aceptas.
Un amigo estaría dispuesto a darte un millón de pesos.
O tú no le caminas a cul*** si es así no te digo más.
Siga cul*** con los de tu edad.
Eres boba cule*** y gratis.
Te doy la oportunidad de tener plata q dices.
Lo que no sabía el supuesto degenerado sexual era que en realidad estaba chateando con la mamá de la niña, quien tiene acceso a las redes sociales de su hija, como es lógico al ser una menor de apenas 11 años.
Poco a poco los padres lo fueron trabajando con la asesoría de la Policía y finalmente lo citaron cerca al colegio de Simón Bolívar, para un supuesto encuentro personal.
En diálogo con
AL DÍA
el papá de la pequeña informó que la niña sufre secuelas sicológicas por el acoso del que fue víctima, no puede dormir bien, está muy nerviosa y se siente intranquila.
“Cuando lo capturaron en el celular le encontraron más conversaciones con otras niñas y videos, fotos del miembro, videos, palabras obscenas, morbosidades, etc., todo eso tiene traumada a la niña, no quiere ni asomarse a la ventana, no ha asistido al colegio y tiene miedo de salir. Ha padecido de insomnio y casi no ha comido”, manifestó el hombre.
Explicó que Jorge Armando Rodríguez Ayala contactó a la menor a través de una amiga por medio de la red social Facebook.
“Todo comenzó por el contacto de una amiguita, esa niña le envió esa proposición a nuestra hija y como ella nos tiene confianza nos mostró, luego empezaron a llegar varios mensajes invitaciones sexuales, proposiciones terribles, pero mi mujer tuvo la sangre fría para seguirle el juego y desenmascararlo”, afirmó el hombre.
Los familiares de la menor víctima le hicieron un llamado a la ciudadanía para estar pendiente de sus hijos y tener supervisión constante de las redes sociales.
“Quienes hayan sido víctimas de este acosador, les pedimos se acerquen a la Fiscalía y denuncien, porque en varios chats manifestó que ya había tenido relaciones sexuales con menores y eso lo convertiría ya en un abusador sexual y la pena sería más dura”, expresó el papá de la pequeña.