El primer crimen en el municipio de Galeras en lo que va corrido de este año tuvo como escenario una zona enmontada situada a un costado de la vía que de esta población conduce a El Roble.
La víctima mortal es Francisco Abelardo Rivas Correa, de 27 años y a quien conocían como Murcia. Le propinaron un balazo en la cabeza y le amarraron las manos, es decir, habría sido torturado y asesinado con un ‘tiro de gracia’.
Su presencia en esa zona enmontada en la mañana de ayer no era extraña porque quienes lo conocían advierten que se dedicaba a sacar varitas para hacer escobas, actividad propia de los nativos de Galeras, y además en las noches acostumbraba a cazar palomas turcas.
Sus familiares y amigos aducen que Rivas Correa no tenía problemas con nadie y nunca habló de amenazas ni nada que pusiera en riesgo su vida, por lo que le piden a las autoridades que investiguen los móviles y autores de este que es el homicidio 15 que ocurre en lo que va del mes de febrero en este departamento.
Las diligencias de inspección del cadáver de Francisco Abelardo Rivas Correa tardaron más de lo acostumbrado, pues tenía en su espalda un morral y por eso el personal del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía que estaba de turno tuvo que esperar que inicialmente los de la unidad antiexplosivos de la Policía Nacional verificaran el contenido de esto para descargar que tuviera explosivos que pudieran ser activados en contra de las autoridades.