“Ahora el teléfono es mío, me lo acabo de robar”, diálogo entre hija de taxista asesinado y el homicida

Una llamada breve que no alcanzó ni el minuto, apenas 58 segundos, es la prueba con la cual los familiares de Víctor Manuel Fontalvo Agámez insisten en afirmar que este no fue asesinado en medio de una riña, como dice la Policía; sino que lo mataron en un atraco, en ejercicio de su oficio de taxista. La memoria de esposo ejemplar, buen padre, trabajador consagrado; es lo que para los parientes de Fontalvo Agámez está en juego.

“Valoramos lo que hizo la Policía al capturar al homicida, pero deben reconocer que el crimen ocurrió en medio de un atraco”, reiteró Etilma Paternina Gaviria, de 50 años, pareja sentimental de Víctor.

Hoy, a un día de que se cumplan dos meses del hecho que desencadenó luego la muerte de Fontalvo; AL DÍA muestra la conversación que según los familiares del taxista sostuvo una de sus hijas con Jonathan Moisés Martínez García, alias Moisesito, a quien la Policía capturó como presunto responsable del homicidio, y quien permanece en la cárcel Modelo. Los parientes del occiso dicen que Moisesito contestó el celular de este, y sin ningún tipo de vergüenza reconoció que acababa de robar el teléfono de Víctor Manuel.

LA LLAMADA…

Hija: Aló Moisesito: ¡Aló! Hija: Buenas, con el señor Víctor por favor. Moisesito: No se encuentra. Hija: ¿Con quién hablo? Moisesito: Estás equivocada, mami todo bien.

Hija: ¿Cómo? Moisesito: Estás equivocada todo bien, este teléfono me lo acabo de robar, todo bien. Hija: Señor este es el número de mi papá, por favor pásemelo. Moisesito: Ya te dije ya, este teléfono se lo acabaron de robar, ya. Hija: Señor por favor, no me diga eso. Moisesito: Pero no te preocupes, a él no le pasó nada. Hija: ¿No le pasó nada? ¿Y usted quién es? Moisesito: ¿A ti qué te importa eso? Hija: ¿Por qué no devuelve el teléfono? Moisesito: ¿Por qué no lo devuelvo?, porque no, porque es mío ya…

Esta conversación fue entregada a investigadores de la Sijín para que sirviera como prueba en el proceso judicial contra ‘Moisesito’, capturado la semana pasada en la calle 71 con carrera 12A, barrio La Esmeralda. Este sujeto tenía orden de captura del Juzgado 12 Penal Municipal con Control de Garantías por solicitud la Fiscalía 11 Especializada, bajo cargos de homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego.

A raíz de la aprehensión de ‘Moisesito’, el comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, general Mariano Botero Coy, envió un sentido mensaje a una de las hijas de la víctima. “Quiero decirle a Melizza Fontalvo que no puedo devolverle a su padre, pero está capturada la persona responsable de este hecho y la justicia debe pesar sobre este individuo”, indicó.

A pesar del audio en el que ‘Moisesito’ reconoce cometer el asalto, la Policía mantiene la hipótesis de que el homicidio fue resultado de una riña derivada por el no pago de la carrera, de parte del señalado asesino. Jorge Guerrero, presidente del sindicato de taxistas Sinchotaxis, apoyó la hipótesis planteada por los dolientes de Fontalvo Agámez. “Apoyamos la tesis de que fue un sinado a ocho taxistas, según Guerrero, “el 50 % de los casos relacionados a su labor”. A Fontalvo lo asaltaron en la calle 71 con carrera 12, en La Esmeralda, “que junto a Nueva Colombia encabezan los cinco barrios que representan mayor peligro para los taxistas debido a los atracos”, explicó el dirigente sindical.

VÍCTOR Y 30 AÑOS DE OFICIO

Para Víctor Manuel Fontalvo, cienaatraco, respetamos la respuesta de la Policía, pero nos basamos en que fue un robo”. En lo que va corrido de 2018 han ase guero de nacimiento, de 50 años, el taxismo era todo. Laboró durante tres décadas detrás de un volante, y aunque en su momento lo dejó para dedicarse a pastorear una iglesia evangélica, hacía dos años que había retornado a la famosa ‘ola amarilla’. Era tal importancia de su oficio que le permitió conocer a su último gran amor, Etilma Paternina Gaviria.

“En junio de 1992, cuando yo trabajaba en el Ley de la calle 72 (Barranquilla), Víctor me hizo una carrera. Aunque no me gustó, es la verdad, me pareció una persona agradable”, comentó Paternina. Esa gracia que lo caracterizaba le dio confianza a Víctor para volver por Etilma. “No sé cómo, pero luego empezó a transitar cerca del almacén hasta que dio con mi horario de salida, comenzó a transportarme y nos fuimos conociendo hasta enamorarnos”.

Etilma y Víctor se casaron en 1993, tuvieron dos hijas, las nuevas hermanas de dos hijos que tuvo el taxista en su primera unión marital. “En todo el tiempo que estuvimos juntos, nunca supe que era verlo bravo. Teníamos peleas por bobadas, sí, pero nunca pasaban de una noche, porque cuando nos acostábamos decía ‘si mañana nos vamos a ver, pa’ qué nos acostamos disgustados’, entonces me hacía reír y ahí se acababa el amargue”, continuó Etilma.

AQUEL TRÁGICO DÍA

Con esa misma alegría que trataba a su esposa, similar a cuando veía su plato favorito: un bocachico en cabrito, así mismo partió Fontalvo de su residencia en Las Trinitarias el pasado 29 de agosto, cuando lo mataron.

“Él siempre salía de la casa a las 6 de la mañana, pero ese día se quedó estudiando (la biblia) vía telefónica con un pastor. Se fue a trabajar a las 8:10 de la mañana, creo que la primera carrera que tomó fue la de ese tipo (‘Moisesito’)”, precisó Etilma. ‘Moisesito’ es señalado de balear a Víctor Fontalvo, quien ingresó de urgencias al Hospital Nazareth, de donde lo rem tieron al Camino Adela de Char.

“Eran como las 9:15 de la mañana cuando me llamaron a decirme que algo grave le había pasado a Víctor, sabía que era grave, pero imaginé que sería un accidente”, continuó Etilma. La mujer le dijo a su hija Melizza que tratara de comunicarse con alguien para saber qué tenía su padre, la joven llamó al celular de Víctor, y fue cuando contestó ‘Moisesito’.

“Ese tipo le dijo que lo había atracado y seguro fue así, porque quien socorre a Víctor nos contó que dentro del carro no estaba ni la tablet de la frecuencia y la cartera estaba desocupada”, añadió Etilma. Mientras alias Moisesito huía –al parecer con una herida de destornillador propinada por Víctor en un acto de defensa- el taxista se debatía entre la vida y la muerte en un quirófano, donde trataron de estabilizarlo por lesiones de bala que afectaron los pulmones – quedaron destrozados-, corazón e hígado.

Víctor Manuel Fontalvo Agamez, hincha del fútbol, quien no se casaba con ningún equipo en particular porque simplemente le gustaba el balón; el mimsmo de las muecas en las fotos, no volvió en sí; su salud se deterioró al punto que la noche del pasado lunes 17 de septiembre falleció. “Nos complace que hayan capturado al responsable, esperamos que se haga justicia, pero por favor que reconozcan que fue un atraco, mi marido no era de riñas”, finalizó Etilma.

Para Sinchotaxi, reconocer que el hecho de sangre sucedió en medio de un asalto implica que el gremio de taxistas deje una vez más por sentado que son blancos fáciles de la delincuencia. “Mucha gente no sabe cuánto lucha un taxista durante 12 o 14 horas de trabajo para hacerse 100 mil pesos, para que venga alguien a robarlos. En medio del desespero, de no dejarse arrebatar el sustento de sus hogares, muchas veces reaccionan y las consecuencias son fatales”, explicó Jorge Guerrero, presidente de Sinchotaxi.