Miwa Sado, de 31 años, era una periodista japonesa de la cadena NHK que murió tras una insuficiencia cardíaca por trabajar excesivamente al mes y solo descansar 2 días en el mes anterior a su muerte.
La mujer, al parecer, habría trabajado 159 horas extra durante el mes, según BBC.
No fue hasta el año 2014 que la autoridad laboral de Tokyo estableció que la mujer murió un año antes por exceso de trabajo y falta de descanso, lo que se conoce en Japón como “karoshi”.
Y hasta este año fue que el medio de comunicación reconoció públicamente que la causa de la muere se dio debido a largas jornadas laborales, por petición de la familia de la víctima.
"Esperamos que el dolor de una familia desolada no sea desperdiciado", indicaron los padres de la joven en un comunicado de NHK.
"Refleja un problema para nuestra organización en su conjunto, incluyendo el sistema laboral y cómo se cubren las elecciones", aseguró el medio de comunicación.
PLAN PARA DERRIBAR EL “KAROSHI”
Tras enterarse de este caso, un tribunal sancionó a la empresa Dentsu y deberá pagar $4.400 dólares, es decir más de $12 millones, por obligar a sus trabajadores a trabajar más horas de las establecidas por la ley.
Matsuri Takahashi, una de sus empleadas, de 24 años, se suicidó en el 2015 después de haber publicado en sus redes sociales que estaba "destrozada física y mentalmente", debido a su carga laboral, pues superaba las 100 horas extra al mes. Es decir, un estrés causado por las largas jornadas laborales.
Entre marzo de 2015 y marzo de 2016, dos mil japoneses se quitaron la vida por estrés relacionado al trabajo, mientras que otros murieron a causa de ataques cardíacos e infartos.
En Japón, no se debe superar las 40 horas de trabajo semanales, a menos que haya un acuerdo entre empleado y jefe que les permita realizar horas extra, según la legislación laboral del país.
El gobierno presentó en marzo un plan para evitar o limitar las horas extra, es decir que, no deberán pasar las 100 horas extras mensuales por ningún motivo u 80 horas en caso de que se “encadenen varios meses con alta carga laboral”.
EXCESO DE TRABAJO IGUAL A PROBLEMA CRÓNICO
Según el profesor de sociología de la universidad de Osaka, Scott North, el exceso de trabajo es un “problema crónico” en Japón y que a pesar que se pongan pequeñas multas no ayudará en lo absoluto a remediar el inconveniente.
"Puedes ver por qué una muerte ocasional puede considerarse un costo de hacer negocios comparativamente pequeño, especialmente si se compara con los costos laborales que se pueden ahorrar al hacer que las personas trabajen horas extra no pagadas", advirtió North a la BBC.
Además, alrededor de la la cuarta parte de las compañías pone a trabajar a sus empleados más de 80 horas al mes, muchas veces no remuneradas.
De 2 mil demandas, cada año, de compensación por exceso de trabajo el 37% son exitosas.
Aunque North les pide a los empresarios bajar las horas de trabajo para los empleados, no existe multa para quien no lo haga.
"Los esfuerzos del gobierno por reconducir el problema del "karoshi" no pueden ser descritos como exitosos", concluyó el profesor.