Un conductor de Uber contó una conmovedora historia que presenció en medio de un servicio a un ciudadano. Con frecuencia, las personas que trabajan en la aplicación de movilidad se enfrentan a diferentes circunstancias del día a día de los pasajeros.
La historia fue revelada por un conductor identificado como Cristian Michell quien contó que al inicio de su jornada laboral decidió realizar una parada momentánea con el fin de comprar su desayuno y mientras se encontraba en el establecimiento recibió una oferta de viaje, por lo que optó por pedir su comida para llevar.
Cuando llegó al lugar donde solicitaron el servicio vio a una adulta mayor sin ningún tipo de compañía o supervisión de algún familiar en la vivienda; sin embargo, el usuario que solicitó el transporte se comunicó por el chat de aplicación para manifestar que el servicio era para la anciana que estaba en la puerta.
“La anciana que estaba afuera llevaba puesto un delantal y comenzó a secarse la lágrimas. En ese momento, vi a algunas personas asomándose por la ventana, pero nadie salió. Recibí un mensaje que decía: ‘no voy a salir, vas a llevar a una persona que está sentada allá afuera’”, explicó Michell sobre el caso.
La adulta mayor le habría revelado al conductor que presentó problemas de convivencia con su yerno quien no se encontraba a gusto con algunos sucesos. Debido a su edad, la anciana se habría orinado la ropa y, al parecer, la pareja sentimental de su hija la sacó de la vivienda y solicitó el servicio de Uber con el fin de llevarla a un asilo.
“Me explicó que se había orinado temprano debido a su incontinencia, y su yerno comenzó a gritarle y decirle cosas horribles. Pero lo que más le dolió fue que su hija no la defendió y simplemente permitió que la maltrataran”, contó el conductor de Uber.
El chófer de Uber la desplazó hacia su lugar de destino, es decir, el asilo y la adulta mayor le agradeció por escucharla y pudo desahogarse aunque dicha situación no cambiaría.