Nos sentamos a hablar con Víctor Mallarino de lo bueno, lo malo y lo feo en el cine y la TV
Conversamos sobre actuar, dirigir, el cine, la televisión, los nuevos actores y hasta el mar.
El talento de Víctor Mallarino De Madariaga ha estado presente en muchas de las producciones más destacadas del teatro, la televisión y el cine colombiano. Sin embargo, este bogotano de 59 años, cuyo debut actoral lo hizo en la telenovela El cazador nocturno (1980), es consciente de que el tiempo ha pasado, y hoy no disfruta mucho verse reflejado en la pantalla. Por este motivo le ha dado rienda suelta a su otra pasión, la dirección y producción de cine y televisión.
Mallarino, que con su 1,90 cm de estatura luce imponente, es un hombre de sonrisa constante que lo pone al alcance de todos. AL DÍA dialogó con este apasionado de las artes dramáticas sobre su papel de director, y de las experiencias que ha acumulado tras tomar las riendas de Calamar, Leche, Amas de casa desesperadas, Celia, La Ley del Corazón (está al aire en RCN) y la cinta Malcriados, que se estrenó este año.
El triple ganador del Premio India Catalina (dos veces como Mejor Actor de Reparto en las telenovelas El Inútil y Quieta Margarita, y una como Mejor Director de la telenovela Leche), también habló de su amor por el mar, la música y su familia.
¿Cuéntenos sobre su faceta como director de cine y televisión?
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Es puro amor en estos momentos, aquí la parte económica pasa a un segundo plano y te concentras en vencer este reto profesional. De momento estoy al aire con la serie La ley del corazón del Canal RCN y la tomé para rendirle un homenaje póstumo a la libretista Mónica Agudelo, quien fue mi gran amiga. Así que quise hacerlo de la mejor manera y con el mejor elenco. Creo que estoy marcando un hito en la televisión, ya que pude reunir en un mismo set a grandes glorias como Judy Henríquez, Carlos Benjumea, Amparo Grisales y a nuevos talentos como Laura Londoño, Sebastián Martínez, Lina Tejeiro, entre otros. Así que como director te puedo confesar que soy muy exigente y no es solo con mis dirigidos o con los directores ejecutivos, sino conmigo mismo.
Metrocuadrado
¿Dónde se siente mejor detrás o delante de las cámaras?
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Me gusta mucho más estar detrás de cámaras, porque tengo mayor libertad, porque el actor entra en un territorio de imagen que lo obliga a ser casi que rígido, entonces tienes que estarte cuidando desde el vestuario, hasta con quién sales y esto te llega a aburrir. Mientras que ser director puedes andar en jean y suéter por todos lados, así como estoy ahora. Lo malo es que el trabajo se te triplica.¿Qué no se mediría a dirigir?
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No haría algo que no tuviese la garantía de poder entregar mi trabajo a cabalidad y con el control de que intento imprimirle a cada escena. Esto actualmente es cada vez es más complicado porque la industria televisiva exige unos tiempos y un frenesí que es muy complejo coordinar. Tampoco me metería en algo que pasara por encima de mis valores personales.¿Cine, tv o teatro, con qué se queda como actor?
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Teatro, porque la entrega es una sola y es con el monstruo enfrente, así que disfruto mucho viéndoles las caras a quienes asisten a mi show. El cine desde el punto de vista de la dirección es lo que estoy buscando hacer ahora, porque llevo tantos años en la televisión siendo feliz, infeliz, riendo, llorando, así que por eso decidí darme nuevos aires.
¿Disfruta aun viéndose en la televisión?
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No, entenderás que pasan los años y la imagen no es la misma, pero lo que sí disfruto es ver las historias que dirijo bien interpretadas por un excelente elenco y con la calidad que requiere cada escena.¿Qué consejo entrega a los jóvenes que se inician en el mundo de la actuación?
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Deben entender que la profesión del actor es dolorosa y complicada. No se puede bajar la guardia un solo momento, hay un instante en que el actor que comienza se llena de talleres y estudios de técnica vocal y expresión corporal; pero al sentir que han acariciado el éxito se relajan y solo se quedan en su imagen física y en la portada de la revista. Ese es el gran error, porque la profesión del actor es como la del médico, requiere mucha actualización, así que siempre debemos seguir estudiando. También deben rescatar las historias que de verdad valgan la pena contarse, para que el público las reciba de la manera más natural posible, prescindiendo del glamour que actualmente pretenden adornar las series de televisión.
¿Qué tipo de historia le gustaría hacer?
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Yo siempre busco las historias íntimas, las chiquitas. Quisiera hacer una gran comedia negra, una comedia absurda en televisión que esté a la altura de la comprensión de la gente que hoy pide muchas alternativas, así que quiero sumergirme en un proyecto que se salga de lo común y tenga mucho humor.¿Qué director marcó su carrera?
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Hay un director inglés del cual soy muy fanático que se llama Mike Leight, lo escojo porque me mueve y me gusta su trabajo. Esto en cuanto a grandes referentes mundiales; pero en Colombia debo nombrar con los que trabajé y me ayudaron a crecer a nivel actoral como Bernardo Romero y Pepe Sánchez.
Con la actiz Maria Eugenia Dávila | El Tiempo
Al momento de descansar ¿Cuál es su plan favorito?
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Lo primero que trato de hacer es ubicar a mis hijos y compartir con ellos. Ya cuando estamos juntos escuchamos rock que es lo que nos apasiona y tomamos algo. Nos gusta mucho la playa, así que si podemos viajar a una de ellas, lo hacemos sin pensarlo.Entréguenos su top 5 a nivel musical
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No voy a hablar de canciones, porque hay muchos que quedan locos con tantos nombres raros, pero mencionare las que a mi consideración son las cinco mejores bandas en la historia del rock. En su orden: The Beatles, Queen, Led Zeppelin, Pink Floyd y Sly & the family Stone.
Metrocuadrado
¿Cuándo piensa rodar por la Costa Caribe?
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Yo casi que nací en la costa, he trabajado muchos proyectos por allá, así que eso sumado a mi amor infinito por el mar me hacen sentir muy costeño. Aprovecho este espacio para pedirles que cuiden el mar, porque no lo están haciendo y eso me duele mucho.Tiene tatuado una tortuga y un tiburón en el antebrazo izquierdo ¿Cuéntenos lo que representan en su vida?
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Muestran lo que te venía diciendo mi alma caribeña, ese amor por el mar y mi pasión por la naturaleza. Estuve haciendo una maniobra de protección a las tortugas en un lugar en el que eran muy maltratadas, así que uní esfuerzos con entidades protectoras de animales y a raíz de la satisfacción del deber logrado decidí tatuarme una de estas.Lo del tiburón es porque hace un par de años estoy sumergido en el tema del aleteo de tiburones martillo en Costa Rica, es una mafia peor que el narcotráfico acá, hay que hacer algo por ellos.
¿A qué le teme?
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A la falta de creatividad, a no ser medido con la vara de mi conocimiento sino del frenesí comercial.
