Un aterrador y macabro hallazgo se produjo en la noche de este martes 15 de noviembre. Enterrados en el interior de una casa fueron hallados los restos de quien habría sido una mujer, Claudia Roxana Reynoso, que al parecer fue vista con vida por última vez hace diez años, de acuerdo con una denuncia interpuesta por su propia hija en una comisaría de la zona.
Se cree que el caso obedece a un feminicidio que habría sido cometido por quien era la pareja de la mujer, el cual se encuentra detenido por abusar sexualmente de sus hijos. Sin embargo, lo que ha llamado la atención es que la desaparición de la madre nunca fue reportada sino hasta que se encontraron los huesos.
Según medios internacionales, el hallazgo se conoció luego de que la hija de la mujer denunciara que su madre llevaba una década desaparecida, apuntando que su padre, Hugo Leiva, sería el responsable de la muerte y de mantener el hecho oculto por tanto tiempo.
Hallazgos
El caso fue puesto en conocimiento de oficiales de policía quienes, al no dar crédito a lo que entraba por sus oídos, remitieron el caso a un Fiscal de la zona. De inmediato, la autoridad dio la orden de investigar en la casa de la familia, donde comenzaron a cavar y descubrieron algo que sembró pánico y asombro: un cráneo.
Poco a poco el polvo se fue haciendo a un lado y entonces los peritos lograron encontrar otros elementos. Un cuchillo, restos de ropa y al final el 90 % de un esqueleto humano.
Lo más sorprendente es que en el cráneo se vislumbra un hueco de lo que sería un golpe con objeto contundente.
La joven tenía sospechas de que los restos podrían estar bajo tierra porque recuerda que su padre estuvo removiendo tierra cuando su madre desapareció.
Las excavaciones se desarrollaron a altas horas de la noche y actualmente continúan las labores de búsqueda en la casa ubicada en Argentina, donde tuvo lugar el inusual hecho.
La joven declaró que su madre era víctima de violencia de género por parte de su padre y que lo denunciaron recién ahora porque eran muy chicos en ese momento, ya que ella tenía 9 años y su hermano 12.