Cómo hacer de la utilización del condón un divertido juego sexual

El uso del preservativo por parte de los jóvenes, puede parecer un procedimiento incómodo y que de repente, en algunos casos, corta la chispa del momento, como le ocurre a la lectora que nos escribe lo siguiente: “Respetado Don Juan, Estoy muy enamorada de mi actual pareja, pero a él no le gusta mucho usar preservativos cuando vamos a hacer el amor, por lo que me gustaría saber qué hacer para que se sienta más a gusto usando el condón”.

No es por nada que entre los hombres existan diferentes mitos, como que no se siente igual, que la erección podría verse afectada o que la sensación está al máximo sin tener que usar un preservativo.

Lo primero, mencionar lo peligroso de no usar el condón al momento del acto sexual. No usarlo desencadenaría diferentes problemas, ya que es el único método para prevenir en un 100% las infecciones de transmisión sexual o disminuir el riesgo de un embarazo no deseado.

Y es que el condón no tiene por qué tener una concepción negativa, frente a la experiencia sexual real que puede ayudar a potenciar su experiencia.

Mejorar la experiencia

No le tema a ese momento donde tiene que ponérselo. Existen bastantes formas de poner un condón, que al contrario de lo que cree, puede añadir mayor excitación al momento.

Hay que olvidarse que poner un preservativo es algo que solo tiene que hacer el hombre, pues su pareja bien puede ayudar a ponerlo y así continuar con la estimulación.

Una de las formas es aplicar un poco de lubricante con sabor en los labios y poner el condón con la boca sin usar las manos. Acariciar los testículos y seguir frotando diferentes partes del cuerpo ayudará a que el ‘amiguito’ no se desanime.

Otra manera divertida de ponerse el condón, es que el hombre practique sexo oral a su pareja mientras, con sus manos ella le pone el preservativo. Eso hará que la escena no sea interrumpida como habitualmente pasa lo que provoca un bajonazo de excitación.

Por otro lado hay preservativos que hoy en día están diseñados, no solo para proteger, sino para aumentar la sensación tanto en las mujeres como en los hombres. En el mercado ya existen condones con estrías, con sabores a frutas y con diferentes lubricantes que pasará a ser más un juguete sexual que una protección.

Los hombres prefieren asegurar su sensibilidad y para eso también existen en el mercado preservativos más finos y fáciles de colocar, y además ergonómicos que se ajustan a la forma de su miembro.

Además si quiere generar mayor impacto, existen unos preservativos especiales que venden en los ‘sex shop’ y que en la punta, tienen una base fija, aumentando el largo del miembro 1 o 2 centímetros.