Demesio Antonio Padilla Griego, de 55 años, permaneció feliz todo el día domingo, pues celebró los Carnavales junto a sus familiares más cercanos; sin embargo, en horas de la noche nadie supo más de él, lo cual fue extraño.
Esto ya que el hombre no acostumbraba a desaparecer de esa manera. Las horas pasaron y en la mañana del lunes apareció. Lamentablemente no de la manera que sus allegados esperaban. Permanecía sin vida dentro del Caño de la Auyama.
Recordando ese día que pasó a ser de efusividad a emotiva tristeza, José Martin Padilla, tío del hoy occiso, contó a AL DÍA detalles de lo ocurrido: “Él estaba tomando desde la una de la tarde del domingo en la casa de una sobrina que llegó de Santa Marta y allá pasó el día. En horas de la noche nuestros familiares se devolvieron para su ciudad y a él lo trajeron hasta acá”.
El hombre continuó tomando, esta vez en su casa. “Como a las 10 de la noche fue la última vez que lo vi, sacó una cerveza y salió, iba bailando por todo el camino. Al día siguiente la mamá me dijo que no había regresado, lo que se me hizo extraño. Yo llamé a sus compañeros del trabajo en el mercado y me dijeron que por allá no estaba tampoco”, añadió el allegado.
La noticia llegó. “A nosotros nos dijeron que había un hombre muerto en el Caño de la Auyama, pero no pensamos que fuera él. Al final fuimos a Medicina Legal y de ahí nos remitieron a la Fiscalía, donde nos mostraron las fotos y lo reconocimos” dijo Padilla.
La causa de la muerte de ‘Junior’, como era tratado de cariño, según los forenses fue debido a su caída: “Nos dicen que es muy probable que haya muerto por la caída, ya que no tenía signos de violencia y las pertenencias también las tenía”, finalizó el familiar.
De Demesio se conoció que se dedicaba a vender frutasen elmercado, que tenía una hija y que era una persona muy conocida entre los habitantes del barrio La Luz, donde residía.