En ese sentido, la Fiscalía le imputó varios cargos relacionados con la presunta adulteración de bebidas alcohólicas, acto considerado un delito de alto riesgo para la salud pública.
Entre los delitos que enfrenta Díaz Noriega se incluyen corrupción de alimentos, productos médicos o material profiláctico; imitación o simulación de alimentos, productos o sustancias; y usurpación de derechos de propiedad industrial.
Cargos Presentados por la Fiscalía
Durante la audiencia, un fiscal de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) presentó la acusación contra Díaz Noriega, quien es señalado de participar en actividades de imitación y falsificación de bebidas alcohólicas.
Estos cargos son calificados por la legislación colombiana como de corrupción en alimentos y usurpación de derechos de propiedad industrial, debido a que se trataría de una actividad que afecta tanto la salud pública como los derechos de propiedad de terceros.
Negación de los Cargos
A pesar de las acusaciones, Díaz Noriega no aceptó los cargos formulados por la Fiscalía.
Sin embargo, la presentación de elementos materiales probatorios durante la audiencia permitió sostener los señalamientos en su contra.
Según lo informado, las pruebas presentadas por la Fiscalía fueron consideradas suficientes para que el juez con funciones de Control de Garantías tomara una decisión en torno a la medida de aseguramiento.
La Fiscalía expuso pruebas materiales que sustentaron la acusación, entre las que se encuentran elementos que indican la supuesta implicación de Díaz Noriega en la producción y distribución de bebidas adulteradas.
Este tipo de pruebas es comúnmente utilizado en casos donde se investiga la corrupción de alimentos o la simulación de productos, como se describe en el Código Penal Colombiano.
Decisión del Juez de Control de Garantías
Con base en los elementos presentados, el juez decidió imponer una medida de aseguramiento en centro carcelario para Díaz Noriega.
Esta decisión implica que el acusado deberá permanecer en prisión mientras avanzan las investigaciones y se da inicio al proceso judicial correspondiente.
De hecho, según el juez, la medida busca evitar posibles riesgos de obstrucción en la investigación y proteger la seguridad de la ciudadanía.
El caso de Díaz Noriega se suma a varios incidentes registrados en Colombia relacionados con la adulteración de bebidas alcohólicas, una actividad ilícita que puede representar riesgos graves para la salud pública.
La adulteración de bebidas ha sido un problema recurrente en zonas de alta actividad turística, como Cartagena, y las autoridades han incrementado los controles para mitigar esta práctica.