La Policía Metropolitana intervino una bodega ubicada en la calle 131 con carrera 14A, en el barrio Ciudad Caribe, donde operaba una estructura dedicada a la producción de licor adulterado. En el allanamiento fueron capturadas dos personas, identificadas como alias “Viejo” y alias “Johana”.
Dentro del inmueble se encontró una fábrica clandestina completamente equipada: tanques de almacenamiento de alcohol, maquinaria para envasado, botellas nuevas y reutilizadas de distintos tamaños, tapas, sellos de seguridad y estampillas falsificadas. Entre los elementos incautados había cerca de 20.000 tapas, 1.000 estampillas y 2.000 sellos, además de grandes cantidades de botellas listas para distribución.
Según la Policía, la estructura lograba generar ingresos mensuales que rondaban los 200 millones de pesos, abasteciendo mercados informales y expendiendo un producto que representaba un grave riesgo para la salud, especialmente en temporada de alto consumo.
Este golpe se suma a operativos recientes contra bebidas adulteradas en Barranquilla, realizados en medio de un incremento de intoxicaciones y casos mortales asociados al consumo de licor ilegal en diferentes sectores de la ciudad.