Un desengaño amoroso sería la causa que llevó a Jaime José Dita Díaz a tomar la fatal decisión de acabar con su vida ingiriendo ácido nítrico. La sustancia le destruyó el estómago y lo tuvo agonizando durante ocho horas aproximadamente.
El caso ocurrió en el Hotel Villas del barrio San Roque, carrera 35 con calle 35. Dita Díaz, de 36 años, bebió el químico a las 10:00 de la noche, después de haber visto por televisión el juego Junior - Nacional.
Cuentan los trabajadores del hotel que entre 5:00 y 6:00 de la tarde Dita Díaz tuvo una fuerte discusión con Karina, una muchacha con quien llevaba cinco meses viviendo en la habitación 109.
La pelea se originó la noche del martes, cuando esta encontró a su compañero con otra mujer en la cama, relataron los trabajadores del negocio, quienes pidieron no revelar sus nombres.
El miércoles en la mañana para componer las cosas, Dita Díaz no trabajó en su puesto callejero de venta de jugos y fritos, que queda a la vuelta del hotel, y se llevó a su mujer de paseo a la playa.
Otros vecinos se sumaron al paseo y con el cambio de escenario todos pensaron que la mujer lo había perdonado.
Pero no fue así, y cuando la pareja regresó a la pieza donde el hombre había cometido la infidelidad, se desató nuevamente la pelea, y Karina se marchó.
Al parecer Jaime José Dita Díaz se encerró a tomar licor y a ver el partido del Junior. En la borrachera se le ocurrió acabar con su vida y se tomó la sustancia. El envase que contenía el químico lo encontraron dos mujeres que entraron a auxiliarlo. Estas ingresaron a la pieza alertadas por los gritos de dolor del hombre agonizante.
Con la ayuda de otros residentes del hotel, que también funciona como residencia, lo llevaron al Hospital Barranquilla donde le prestaron los primeros auxilios y trataron de salvarle la vida. Sin embargo, esto fue imposible por el severo daño que Dita Díaz había sufrido en el sistema gástrico.
Los familiares de Dita llegaron ayer en la mañana a reclamar su cadáver en Medicina Legal. La madre alcanzó a informar que su hijo deja huérfana una niña, y que acostumbraba vivir en hoteles. Luego una de sus hijas la interrumpió y no dejó que hablara más con la prensa.
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