Cinco asesinatos se registraron este miércoles en el área metropolitana de Barranquilla. La última víctima fue una mujer, la segunda en ser asesinada esta semana en la ciudad. Aunque parezcan simples datos, estas dos cifras en un solo día son muestra de la dolorosa realidad que preocupa entre tanto se aligeran las restricciones de circulación.
Según reportó la Policía Metropolitana de Barranquilla, Claudia Patricia Hernández, de 46 años, estaba en la terraza de su casa en la tarde del miércoles. Vivía en la carrera 3B1 con calle 53B, en el barrio Las Américas, y alrededor de las 7:30 de la noche llegaron a matarla.
Dos hombres movilizándose en una motocicleta llegaron hasta la casa de Claudia. Uno de ellos desenfundó un arma de fuego y le apuntó a la mujer. Sin perder tiempo, disparó. Tres balas certeras le dieron en el pecho a la mujer, y una más le impactó en la pierna.
Claudia no murió enseguida. Luchó por su vida durante varias horas en la Clínica San Ignacio, a donde la trasladaron al auxiliarla. Sin embargo, a las 11:25 de la noche del mismo miércoles los galenos del centro médico notificaron el fallecimiento de la mujer. En ese momento, Claudia se convirtió en la mujer número 26 en ser asesinada en lo que va de 2020 en el Atlántico.
Los sicarios de Claudia huyeron. La Policía activó el dispositivo operativo e investigativo para dar con su paradero, pero no se ha informado que hayan identificado a los responsables. Están huyendo, así como lo hace el asesino de Daniela Espitia Flores, la joven de 21 que también fue asesinada esta semana, el lunes, en un motel del Centro de Barranquilla.
En la mañana del miércoles también murió otra mujer, Marleivis Tafur Ariza, quien fue víctima de un atentado a bala el pasado 13 de julio, en la transversal 2D-10 No. 54B-50 del barrio La Candelaria, en Soledad.
“Ella estaba en la puerta viendo una pelea que había por la casa. Entonces ella se sentó ahí, en la puerta, y ahí llegaron los tipos y la balearon estando con el hijo cargado, un niño de dos años”, relató una de las familiares de la víctima.
Como resultado, Marleivis recibió dos impactos de bala que le destrozaron el abdomen. Inicialmente, según sus allegados, la trasladaron a la Clínica Campbell de la 30 y de allí, tres días después, la remitieron a la Clínica Reina Catalina, donde estuvo internada hasta las 11:00 de la mañana de este miércoles, cuando murió.
En el atentado también resultó herida Nelis Orozco García, de 34 años.
Los otros homicidios registrados este miércoles fueron los de Alejandro Miguel Rubio Ortega, de 34 años, asesinado en la tarde de ayer en el barrio Siete de Agosto; y el de Alexander José Márquez, de 32 años, baleado en Los Ángeles en un ataque sicarial que también dejó herido a Luis Ángel Guzmán Polo, de 27.
Así mismo, durante el fuerte aguacero que se registró este miércoles, pandillas salieron a enfrentarse en la calle 51B con carrera 4 del barrio Siete de Abril. Como resultado, un adolescente de 17 años y dos jóvenes resultaron heridos por perdigones de escopeta.
En Soledad fue asesinado en la madrugada de ayer Antony Figueroa Hurtado, de 40 años, en el barrio Ciudad Paraíso, y antes de que se aligerara el ambiente en ese sector, Víctor Alfonso Araujo Ensuncho, alias Búfalo, fue víctima de un ataque a bala que lo dejó en UCI en la Clínica Adela de Char. En el barrio San Vicente mataron a Jaime Martínez Pérez, de 32 años.
Recompensa por asesino
La Fiscalía General de la Nación y la Alcaldía, ofrecen $5.000.000 de recompensa por información que permita dar con el paradero de la persona responsable de la muerte de Daniela Espitia Flórez, la joven de 21 años que fue asesinada en la tarde de este lunes en un motel en el Centro de Barranquilla. Quien tenga información puede comunicarse a los teléfonos 318 388 1108 y 300 382 5021.
También se confirmó que hay una orden de captura contra el exmarido de la joven, Deimer Eduardo Díaz Mendoza, por el crimen. Esta fue emitida el 19 de agosto por el juez 12 Penal Municipal, a solicitud de un fiscal seccional de la Unidad de Alertas Tempranas para Homicidios; pues el hombre quedó registrado por las cámaras de seguridad del motel cuando ingresó junto a la joven y salió hora y media más tarde solo, con el bolso de ella y “sonriendo”.