A raíz de la ola de asesinatos de adolescentes en los choques entre pandillas en el suroccidente de la ciudad, la comunidad del barrio El Bosque decidió organizarse y gestar el movimiento ciudadano "Antorchas por la vida y por la Paz", que la noche del jueves recorrió las calles del sector clamando paz.
La idea surgió hace siete días de un grupo de jóvenes universitarios que a través de las redes sociales impulsaron la iniciativa.
A las 6 de la tarde del jueves con un ataúd simbólico, pancartas, velas encendidas y antorchas, cerca de mil personas salieron a recorrer las calles de este populoso sector.
El punto de encuentro fue la calle 74 con carrera 9B, frente al camino Bosques de María, y marcharon hasta el parque contiguo a la cárcel distrital El Bosque.
De acuerdo con Alexis Castillo, uno de los promotores del movimiento social, el sentimiento de solidaridad hacia las familias de los jóvenes fallecidos; y la impotencia de sentir que la violencia ya les estaba marcando territorios; lo motivaron a él y a varios jóvenes estudiantiles y líderes comunales a despertar y hacerles un llamado urgente a los jóvenes y a sus familias para que cese tanta violencia inútil.
Para la comunidad involucrada en este flagelo la solución va más allá de acciones mediáticas y proyectos focalizados en grupos delincuenciales.
Insisten en que se requieren de proyectos integrales que incluyan a todo el núcleo familiar en los que estos jóvenes convergen, y que algunos de los padres sean capaces de reconocer que necesitan ayuda pues perdieron el control sobre sus hijos.
“No sabemos cuáles son las condiciones en las que viven esos jóvenes, ya muchos tienen mujer e hijos. En el 2012 la Alcaldía tenía la estrategia "Va Jugando". Los muchachos salían de jugar bola e trapo, pero cuando llegaban de regreso a los hogares sus familias no tenían qué comer. No solo hay que llegarle con programas sociales al pandillero, sino al hijo que ya tiene a su cargo y a la madre adolescente que integra ese hogar”, añadió Alexis Castillo.
EL CLAMOR DE LA COMUNIDAD
Insistieron en que las familias de estos muchachos deben jugar papel importante en cualquier plan o programa que se quiera implementar para ayudarlos.