Más de 15 días demoró Juan Miguel Ramos Rodríguez, de 20 años, luchando contra la muerte luego de recibir tres balazos, dos de ellos en la pierna derecha y uno en la clavícula.
El joven falleció entrada la noche de ayer en el Hospital Universitario de Sincelejo (HUS) donde estaba internado desde el 13 de marzo cuando resultó herido a bala frente a su vivienda en el barrio Villa Orieta, zona norte de Sincelejo. En los últimos días estaba esperando la autorización de la EPS Comparta para una remisión, pero esta nunca llegó.
Hace una semana lo llevaron a la clínica La Concepción para hacerle un examen en la pierna que iba a ser amputada. Minutos antes de ingresar a la cirugía ayer, falleció.
EL HECHO CRIMINAL
La noche del atentado el joven estaba sentado con un hermano en un andén frente a su casa cuando dos hombres que se movilizaban en una motocicleta los abordaron.
El parrillero hizo unos nueve disparos, tres de los cuales impactaron a Juan Miguel. Por este hecho la Policía capturó a Juan González Rivero quien supuestamente iba manejando la moto.
Un juez le dio detención domiciliaria. En el Hospital Universitario de Sincelejo (HUS) se vivieron escenas de dolor cuando los familiares se enteraron de la prematura partida del muchacho que se dedicaba a los oficios varios. Dejó una niña de dos años.
En su momento los familiares relataron que el ataque estaría relacionado con un lío que hubo hace varias semanas con un hombre que supuestamente atracó a una muchachas en el barrio. Piden justicia.