Una tragedia está viviendo una familia wayuu que habita en la zona rural de Monguí (Riohacha), luego que el mayor de tres hermanos falleciera y los otros dos aún permanezcan en un centro asistencial, tras haber padecido por lo que sería un cuadro de intoxicación.
Contó un familiar que los menores para divertirse recolectan botellas plásticas a las cuales les quitan las tapas, para luego hacer figuras o torres y lanzarles piedras para derribarlas.
Estando en esas prácticas, en la tarde del lunes los niños fueron llamados por sus padres para tomar los alimentos “teníamos una yuca, así que la cocinamos y comimos con huevo”, indicó el papá de los niños.
La sorpresa para la familia es que transcurridos quince minutos el niño mayor de siete años comenzó a convulsionar.
Inicialmente fueron atendidos según sus usos y costumbres, pero en vista de que no mejoraba fue trasladado a un centro asistencial.
Posteriormente, también fueron trasladados los otros dos hermanos de cinco y tres años, quienes también convulsionaron y vomitaron en reiteradas ocasiones.
“Cuando el mayor llegó a la clínica lo reanimaron, luego lo trasladaron en ambulancia para otro centro y en el caminó nuevamente convulsionó y murió”, indicó el padre.
De manera preliminar los médicos indicaron que podría tratarse de una intoxicación, sin embargo el padre de los menores asegura que él y su esposa que está embarazada comieron y nada les pasó.
“Se me ocurre que una de las botellas estuviera contaminada, y seguro tocaron la comida con las manos y se la llevaron a la boca; si la yuca estuviera mala a mí también me hubiese dado algo”, manifestó en medio del llanto el padre de las criaturas.