Mataron a ’Canciano’, un vendedor de mariscos a un lado de la troncal del Caribe
El atentado ocurrió en jurisdicción de la Isla del Rosario en el municipio de Puebloviejo, Magdalena.
Un balazo en el tórax, además de otro en una pierna segaron la vida Antonio Álvarez Rodríguez, de 44 años, conocido como ‘Canciano’, después que desconocidos lo sorprendieran y le dispararan en diferentes ocasiones a un lado de la Troncal del Caribe, en la jurisdicción de Puebloviejo, Magdalena.
El atentado que condujo a la muerte a Álvarez Rodríguez, quien se dedicaba a la comercialización de pescados y mariscos en Ciénaga, El Rodadero y Santa Marta, ocurrió la noche de martes en el corregimiento de la Isla del Rosario.
De acuerdo con las autoridades, una patrulla del Tercer Distrito de la
Policía Metropolitana de Santa Marta, adscrita a la Estación de Policía de Puebloviejo, se dirigía hacia el corregimiento de Tasajera, cuando se toparon con una aglomeración de personas, quienes les informaron que un hombre había sido herido de bala.
Sin perder más tiempo, Álvarez fue trasladado hasta la urgencia del Hospital San José, en la cabecera municipal, al que infortunadamente llegó muerto, sin que los galenos que lo recibieron lograran reanimarlo.
Informados del suceso, criminalistas de la Sijín del Tercer Distrito de la Policía Metropolitana llevaron a cabo la inspección técnica y levantamiento del cadáver, el cual fue llevado hasta la morgue del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses en el vecino municipio de Ciénaga.
Tras la necropsia llevada a cabo el día de hoy, los restos mortales de Álvarez Rodríguez fueron devueltos a sus dolientes, quienes optaron por no dar declaraciones acerca de su asesinato.
Entre tanto, las autoridades revelaron que ‘Canciano’ era señalado de supuestamente comerciar drogas ilícitas, además, era hermano de alias ‘Tarra’, presunto sicario y dinamizador del tráfico local de estupefacientes al servicio de Los Pachencas, el cual está privado de la libertad, por lo que presumen que esta muerte podría ser provocada, al parecer, por una retaliación.
“La investigación aún no ha concluido, pero esperamos pronto tener indicios más claros acerca de los móviles del hecho y la identidad de los responsables”, aseveró un criminalista de la Policía Judicial.
