Testimonios de desespero, de ganas de salir adelante y encontrar nuevos caminos, son los que se les escucha a muchos de los venezolanos que migran del país vecino buscando una oportunidad laboral para sobrevivir de cualquier manera. En el trimestre de agosto a octubre, en promedio, unos 85.000 venezolanos ingresaron al país, según los boletines de Migración Colombia.
Cartagena ha ‘adoptado’ a cientos de ellos en diferentes oficios y ese era precisamente, el espacio que buscaban Luis Alejandro Rodríguez Revollo y Sandro Rodríguez Olean, dos primos de 20 y 21 años, respectivamente, que venían en épocas de vacaciones cuando eran niños a visitar a familiares en el barrio La Esperanza, pero en esta ocasión venían en búsqueda de trabajo.
LOS ESPERÓ LA MUERTE
El pasado domingo, Luis Alejandro estaba cumpliendo años, pero con solo 8 días de haber llegado y poco dinero, decidió ir por fritos a la esquina con su primo Sandro y estando ahí se escucharon los disparos y la alta velocidad de las motos a ambos primos los esperaron las balas.
El cumplimentado murió en ese mismo instante, al recibir dos impactos de bala, en la espalda. Los proyectiles a Sandro, le comprometieron el pómulo izquierdo y el tórax y lo esperó la muerte la mañana del lunes.
IDENTIFICADOS
A las 10:00 de la noche se registró esta tragedia, que según cuentan vecinos es común porque son lideradas pandillas.
“Ellos sólo venían a buscar trabajo, porque en su país la estaban pasando muy mal”, cuentan familiares de las víctimas.
Los presuntos culpables, identificados por vecinos del barrio, serían alias ‘Fabian’ y ‘Wilfram’, pertenecientes a la pandilla de ‘La 18’, que con frecuencia rodean las calles intimidando haciendo disparos, como lo hicieron esa noche.