‘Lobo Feroz’ detalló en email abusos a 91 niños en Barranquilla
Así lo estableció la Fiscalía en los procesos por los cuales fue sentenciado.
“Gracias a labores investigativas de las autoridades colombianas se estableció que Juan Carlos Sánchez Latorre, desde el mes de julio 2007 a noviembre de 2008, utilizaba los centros comerciales Metrocentro y Portal del Prado de Barranquilla, para abordar a menores de 13 años a quienes les ofrecía dinero con el fin de accederlos, hacer tocamientos, videos y fotografías de contenido pornográfico infantil o representaciones de carácter sexual”, detalló en su sentencia condenatoria la Juez Novena del circuito contra alias El Lobo Feroz.
Dicha sentencia anticipada por la juez corresponde al allanamiento de cargos del procesado el pasado 14 de septiembre de 2018 en Bogotá, un día después de ser repatriado desde un centro carcelario en Venezuela.
En dichas audiencias Sánchez Latorre aceptó cargos por los delitos de actos sexuales con menor de 14 años agravado en concurso homogéneo de 91 víctimas, pornografía con menor de 18 años, acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado en concurso homogéneo y sucesivo.
Las víctimas
Dentro de la tesis del despacho planteada en la condena a 60 años de prisión al hombre de 38 años, analista y programador de sistemas; la Juez Aura Rosero Baquero estableció que “se satisfacen los presupuestos sobre la aceptación de cargos manifestada por el procesado” y añade que sobre los delitos de acceso carnal abusivo, la Fiscalía trajo como material probatorio 19 videos y 72 imágenes de contenido sexual explicito donde el hoy condenado abusó a 91 menores de edad.
La Fiscalía a pesar no lograr establecer la identidad completa de todas las víctimas, si pudo establecer por los correos electrónicos que el procesado intercambiaba con consumidores de ‘porno’ infantil en el exterior, que los menores residían en la ciudad de Barranquilla.
“El procesado en los correos detallaba los sitios de abordaje a las víctimas, direcciones donde ocurrían los vejámenes y la procedencia de los menores”, explicó una fuente judicial allegada al caso.
Para complementar el material probatorio el ente acusador presentó a la togada los testimonios de dos personas que para la fecha de los abusos (2009) tenían 5 años y 9 años de edad respectivamente.
Por *Camilo Bermúdez