La prima de diciembre se va en: gastar, gastar y gastar

No hay mal que dure cien años, ni prima que llegue al 24, se podría decir por estos días, parafraseando un viejo adagio popular. Es así. En estos días, en los que las empresas pagan la prima de fin de año a sus trabajadores, el comercio permanece abarrotado de ávidos compradores.

“Es que hacer compras en diciembre no es cualquier cosa, hay que saber dónde hacerlo y a qué hora”, asegura Margarita, una secretaria de 30 años y madre de dos niños de 5 y 9 años.

Margarita busca cuidadosamente en la sección de niños de tienda por departamentos las prendas de vestir que usarán sus hijos en Navidad. “Me gusta comprarles ropa con una talla más para que no se le quede rápido”, afirma mientras empuja un carrito en que se mezclan ropa, juguetes y algunos objetos de decoración navideña.

Esta barranquillera residente en el barrio Boston señala que desde noviembre ya tenía programado lo que iba a hacer con su prima. “Una parte es para los juguetes de los niños, estos los compramos entre mi esposo y yo, otra para la ropa, porque hay que estrenar el 7, el 24 y el 31 (de diciembre) y lo que me queda es para pagar una tarjeta de crédito que tengo pendiente”, agrega entre risas.

Pese a las recomendaciones de los asesores financieros y expertos en economía de bolsillo, sobre la importancia de ahorrar una parte de estos recursos adicionales que se reciben a mitad y final de año, la mayoría de los asalariados, de acuerdo con un estudio de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), opta por usarlos en gastos varios y pago de deudas.

plata de bolsillo.“Se vuelve plata de bolsillo”, no duda en decir Jaime Martínez, quien estrena nieto este año y asegura que una buena parte de su prima la destinó para comprar el aguinaldo del pequeño.

En esta temporada se vive una verdadera locura por las compras en un comercio que ofrece toda clase de artículos, aprovechando el dinero extra que entra en circulación.

Desde los tradicionales juguetes para los niños, pasando por los ingredientes de la cena navideña, la ropa que para estrenar en Nochebuena y Fin de Año, pago de deudas y aguinaldos, barranquilleros y caribeños aprovechan para gastar a manos llenas en tecnología, electrodomésticos, mejoras en el hogar y toda suerte de objetos y servicios postergados una y otra vez durante el año, porque “la plata nunca alcanza”.

Lo cierto es que casi nadie piensa por estos días en hacer inversiones o ahorrar, la prioridad de acuerdo con muchos es “comprar o salir de las culebras”.

Se calcula que unos 8 millones de empleados en Colombia reciben la prima de servicio. Este es un derecho que tienen todos los trabajadores y corresponde a un salario por año trabajado o proporcional al tiempo laborado, el cual se paga en dos partes, una en junio y otra en diciembre.

La fecha límite para el pago es el 20 de diciembre y las empresas que no cumplan con esta obligación se ven avocadas a sanciones, como lo ha recordado la ministra de Trabajo, Alicia Arango.

Ropa y regalos

Para conocer las tendencias de este año, EL HERALDO consultó en la calle a varios barranquilleros sobre el uso que planeaba darle al dinero de la prima.

Karen Polo asegura que la mayoría de su prima la gasta en compras de vestuario, calzado, accesorios y comida, esta es la misma preferencia que muestran muchos jóvenes solteros, para quienes es importante disfrutar y lucir bien en el fin de año.

Para Vera García, los primeros en su lista de compras navideñas son sus nietos. “Voy a comprarles juguetes”, asegura.

Por su parte, Rosario Álvarez dice que pensaba adquirir ropa y regalos para su familia, mientras observa la oferta de juguetes que hay en una feria en el Centro de Barranquilla.

La tendencia

El aumento del consumo en la temporada de Navidad se explica de acuerdo con los analistas por diversas causas que van desde lo cultural hasta lo personal.

Irina del Mar Nieto, coach de la Financiera Progressa, explica que “cuando una persona sabe que va a recibir un dinero extra, como la prima de Navidad, entran en juego emociones como la ansiedad, miedo a perderlo o gastarlo y aumenta el sentimiento de querer ayudar a otros”.

Para la experta, lo importante es que los trabajadores sean conscientes de sus prioridades y no se permitan gastos desmedidos o innecesarios, que terminan por convertir al mes más esperado, en la antesala de un nuevo año lleno de deudas, preocupaciones, estrés y un ritmo acelerado de vida.

Leopoldo Romero, CEO de ChevyPlan, dice que solo 2 de cada 5 personas hacen inversiones con la prima, pues el colombiano promedio ve este bono laboral como una extensión de capital y lo utiliza como parte del gasto diario.

“Las personas deben implementar el ahorro todo el año y no solo en épocas de prima, deben verlo como un hábito que conjuga la dedicación y la disciplina como una salida al endeudamiento”, asevera.

Al preguntarle a Margarita si planeaba ahorrar algo de la prima, dijo que realmente no pensaba que le quedaran recursos para hacerlo. “Imagínese, si no llega la prima no hay Niño Dios para los niños ni ropa para estrenar, si la plata llega hay que usarla”.

Doméstico

La ministra de Trabajo, Alicia Arango, aseguró que de los 687 mil trabajadores domésticos que hay en Colombia solo un 30% recibe el pago de la prima y está formalizado. Arango hizo un llamado a los empleadores para que cumplan con esta obligación de la cual dijo que “más que de ley es del corazón”.

Advirtió que el no pago de la prima de servicios a un trabajador doméstico, genera sanción a los empleadores la que consiste en una multa es de un día de salario por cada día de mora. Se consideran trabajadores domésticos a toda persona natural que presta sus servicios a los hogares en tareas como aseo, cocina, lavado, planchado, jardinería, conductor de familia y cuidado de finca, niñeras y mayordomos.

Con información de: Lupe Mouthón.