Con júbilo en sus corazones, miembros de la familia Núñez Tordecilla se reencontraron la tarde del domingo con Martín Gregorio Núñez Tordecilla, quien hace 18 años había perdido el contacto con sus padres y hermanos siendo reportado como desaparecido ante las autoridades.
La familia trata de recuperar en lo posible el tiempo perdido | Néstor De Ávila
El hombre, de 48 años, decidió viajar a la a Ciudad de Ojeda, en el estado de Zulia en Venezuela, con con el fin de mejorar un poco su calidad de vida. Sin embargo, al llegar a este país la realidad que se encontró fue muy distinta. Una serie de eventos desafortunados hicieron que permaneciera tanto tiempo desaparecido.
Perdió todos los documentos y los objetos que llevaba, quedando totalmente incomunicado, y sin números de teléfonos a donde llamar para informar a su familia que se encontraba bien, por lo que inició su vida desde cero.
Recuerda que desde diciembre del año pasado empezó a reunir dinero para retornar a Colombia y dar con el paradero de su familia. El pasado domingo 22 de enero llegó a Valledupar, aunque al principio tenía temor porque no sabía si se habían mudado del barrio Villa Corelca, donde han vivido hace más de 40 años.
MI CORAZÓN ME DECÍA QUE ESTABA VIVO
Con la voz entrecortada y lágrimas en sus ojos, Etelvina Tordecilla Sánchez, de 68 años, la madre de Pepe, como es conocido desde pequeño por el sector, aseguró que su corazón de madre sentía que no estaba muerto.
Las calles llenas de piedras donde Martín Gregorio solía jugar trompos con sus amigos de infancia, con el pasar de los años han cambiado, por lo que cuando llegó a Valledupar no reconoció la casa de sus padres.
‘‘Le dijo al taxista que se metiera por la parte de atrás del estadio y ahí fue que contó las casas y pudo llegar aquí, una vecina al lado lo vio y terminó de ubicarlo y salieron todos gritando de la alegría ¡Llegó Pepe!’’, manifestó Etelvina Tordecilla.
Por lo pronto, Martín tiene pensado radicarse en la capital del Cesar, además de traerse a sus tres hijos y tres nietos que aún están en Venezuela, todo por tener a su familia unida y tratar de recuperar el tiempo perdido.