Aunque la versión de la Policía Metropolitana y del alcalde de Soledad, Joao Herrera, coinciden en que el asesinato a bala de los jóvenes Gregorio José Niebles Cantillo y Duván Herrera Torres, (16 y 13 años respectivamente), ocurrido a las 12:40 de la madrugada de este lunes en el barrio Villa Sol, obedece a una retaliación por no entregar el botín de un hurto al jefe de una banda delincuencial de la que hacían parte; los padres de los menores niegan tajantemente tal afirmación.
“Duván estaba amenazado por personas que lo acusaban de robar un celular, pero todo eso es falso”, afirmó José David Herrera Puello, padre del muchacho.
“Mi hijo no tenía problemas con nadie. No entiendo qué pasó”, puntualizó por su parte Jairo Niebles, padre de Gregorio.
Los apesadumbrados padres hablaron este lunes con AL DÍA en las afueras de Medicina Legal, donde autorizaron revelar los nombres de sus hijos y entregaron las fotografías para aclarar lo que ellos consideran “un mal entendido con los pelaos”.
“Lo que sabemos es que estaban de fiesta y cuando se movieron del sitio los atacaron dos sujetos que aguardaban por ellos”, agregó Herrera Puello.
La versión que manejan las autoridades judiciales y civiles es la siguiente: Gregorio y Duvan estaban con un grupo de amigos ingiriendo licor cerca de la cancha de fútbol del barrio Villa María de Soledad, carrera 1D con calle 58.
De repente se agotó la bebida y los dos fueron comisionados por sus amigos para buscar otra botella para continuar con la parranda.
Los dos jóvenes salieron por el encargo en una motocicleta, y cuando se desplazaban por la carrera 3 con calle 56, de Villa Sol, fueron alcanzados por otros dos motociclistas que sin previo cruce de palabras los atacaron a bala.
Duvan recibió un balazo en el pómulo izquierdo y falleció en el sitio. Gregorio fue baleado en la frente y en la espalda, alcanzaron a llevarlo con vida a la clínica Adelita de Char, pero allí murió a los pocos minutos.
¿POR QUÉ LOS MATARON?
El subcomandante operativo de la Policía Metropolitana de Barranquilla, coronel Jesús De los Reyes, precisó que la primera línea de investigación sobre el crimen sugiere un ajuste de cuentas entre miembros de la banda ‘los Kevin’, dedicada a la venta de estupefacientes y hurto de motocicletas.
“Sujetos identificados con los alias de Kevin y Douglas balearon a los menores de edad en un problema relacionado a bandas delincuenciales”, explicó el oficial.
Joao Herrera, alcalde de Soledad, manifestó que los occisos participaron en un asalto comandado por ‘Kevin’, hurtando dinero y celulares que no le entregaron al cabecilla de la banda, que decidió ‘ajustar cuentas’ cobrándoles con la vida.
“También se supo que uno de los jóvenes ultimados debía estado recluido en la correccional, pero días atrás escapó”, aseguró el mandatario soledeño.
El joven Duván Herrera residía con la mamá en Villa Sol, cursaba séptimo grado, y era el segundo de siete hermanos.
Gregorio Niebles criaba gallos de pelea. Residía en Villa María con una tía.
“Hubiera preferido verlo preso que muerto”, sentenció la mamá de Niebles sobre la afirmación que hizo el alcalde de Soledad de que uno de los muchachos debía permanecer en la correccional.