El no pago del dinero de un tatuaje sería presuntamente el motivo que originó la pelea entre dos jóvenes en el barrio El Pando, la cual terminó en el asesinato de Diego Andrés del Río Toncel, de 18 años, y la detención de un joven de 17. “El problema viene por un tatuaje. El difunto lo tiene en la espalda y mi nieto en el brazo derecho. Mi otro nieto me dice que el problema nació en una fiesta por una plata que le prestaron para hacerse un tatuaje”, explicó una familiar del procesado.
Sobre esta situación, la coronel Sandra Vallejos, jefe de la Policía Metropolitana de Santa Marta, exhortó a los padres de familia para que“en vez de empujar, ayuden a mediar” en la resolución de conflictos.
“La misma familia del agresor lo llevó a estas circunstancias, en vez de detenerlo, protagonizan un escenario de riesgo, y el resultado es que el menor no contiene su histeria y agrede al muchacho que fallece”, dijo.
Cuenta la coronel Vallejos personal de criminalística realiza la recolección de testimonios para determinar las verdaderas causas del asesinato. Manifestó que en ese barrio algunos vecinos se han enfrentado con las autoridades, cuando realizan controles al microtráfico y en la prevención del hurto.
“Son hechos recurrentes. La policía interviene y la comunidad protege a estos jóvenes, enseñándoles que el uso de la fuerza y el camino de la agresión es la forma de acceder a sus resultados”, explicó la comandante.
En la tarde de ayer, el menor compareció ante un Juez de Familia. Al cierre de la edición se desconocía si el procesado por homicidio iba a ser enviado a un centro de reclusión de menores. El 21 de marzo, hinchas de Junior y Nacional se enfrentaron a puñal en el municipio de Ciénaga. Un menor resultó muerto tras esa riña.