¿Qué Pasa?

Castor y digno, compadres y capos del mal

AL DÍA le cuenta cómo los jefes de Los Costeños manejaron sus negocios ilegales hasta convertirse en la banda criminal más temida

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Tras la caída en Maracaibo, Venezuela, de Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, hoy se abre el expediente con los hechos criminales que este ordenó bajo la clandestinidad desde 2013, año en el que salió en libertad por vencimiento de términos y se consolidó como cabecilla de la banda criminal Los Costeños junto a su ‘compadre’ Digno Palomino Rodríguez.

Entre ambos y su ejército del mal, según investigaciones policiales, concertaron gran cantidad de delitos en Barranquilla y su Área Metropolitana. Los dos habían aprendido bien la tarea de los hermanos exparamilitares Juan Manuel y Brayan Borré Barreto, hoy presos.

Una de esas misiones criminales de Castor y Digno fue librar desde hace algún tiempo una batalla con la banda Los Papalópez, enquistada en La Chinita, por el dominio de al menos 150 ollas de droga en Barranquilla, Soledad y Malambo.

En julio de 2018, en un debate realizado en el Concejo de Barranquilla y al cual fue citado el comandante de la Policía Metropolitana, general Mariano Botero Coy, este se refirió a los “tentáculos del microtráfico en la capital del Atlántico”. Expresó que el fenómeno de las drogas debía ser atacado de manera “conjunta” por parte de todos los estamentos de la sociedad para prevenir que los menores entraran en este “oscuro mundo”.

Al referirse a las acciones desarrolladas para enfrentar a las bandas dedicadas al microtráfico, el general Botero Coy detalló que entre 2017 y 2018 de 25 inmuebles dedicados a la venta de drogas en Barranquilla y su área metropolitana, 18 habían sido sometidos a procesos de extinción de dominio. “Fueron expropiados estos 18, pero quienes habitan en los restante tienen casa por cárcel. Estos bienes no se pueden vender ni arrendar, pero se requiere la demolición de estos inmuebles”, manifestó el oficial ante los miembros del cabildo.

En ese momento, el general aseguró además a los concejales que parte del negocio del microtráfico lo manejaban Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, y Digno Palomino Rodríguez, “los dos sujetos más buscados de la ciudad”.

De esa lucha entre Los Costeños y Los Papalópez se desprenden decenas de homicidios selectivos. Sin embargo una fuente judicial aclara que Díaz Collazos no llegaba a ejecutar un hecho criminal como tal sino que delegaba en Palomino y sus hombres para que fueran ellos quienes lo materializaran.

Soledad y la zona del centro de Barranquilla, en el mercado de Barranquillita, fueron epicentro de muchos hechos de sangre, incluso de descuartizamientos. Para ejecutar un asesinato, de acuerdo con fuentes policiales, Castor y Digno también tenían el apoyo de la pandilla de Los 40 Negritos, bajo el mando de alias Gordo 40.

Casualmente el último caso de descuartizamiento ocurrió en Barranquilla en julio del año anterior. En el barrio de invasión La Bendición de Dios, en pleno centro de la ciudad, no muy lejos de la sede de la Alcaldía, la Fiscalía, la Rama Judicial, la Gobernación, y otros centros del poder estatal, fue hallado el cuerpo desmembrado de Reinaldo José Krautz Visbal, de 37 años, exmilitar quien según sus familiares se dedicaba a prestar dinero, pero, según las autoridades, era eje importante de la banda criminal Los Costeños.

‘Es un gerente del crimen’

“Castor es el prototipo de nuevo narco: con gustos y modales finos. Le gusta vestir bien, ropa de marca, tiene estudios de Derecho y, antes de ser bandido, intentó incursionar en política en el Consejo de Juventudes y hasta fue líder zonal de barrios en el Suroriente para el manejo de votos para política. No se graduó, pero los estudios le dan otro status, otra forma de ver la delincuencia como un tema más organizacional y empresarial. Un gerente del crimen”, aseguró un investigador de la Policía que ha estudiado desde 2005 la vida criminal de Jorge Eliécer Díaz Collazos.

Años atrás se estableció que la organización de Díaz Collazos y Digno recibía al mes entre $90 y $100 millones para el ‘sueldo’ de sicarios, distribuidores de drogas, cobradores de extorsiones y reclutadores. Hoy esa cifra puede alcanzar los $120 y los $150 millones de pesos, según la fuente.

Incluso, el investigador señaló que aún tiene en su memoria una frase que en algún momento le dijo Juan Manuel Borré Barreto en un interrogatorio: “Ni en las Autodefensas ni en las bandas criminales he visto una mente brillante como la de Castor”.

‘Pronto caeré yo y eso no acabará con la inseguridad en la ciudad’

Digno Palomino, activo como siempre en redes sociales, aseguró desde su cuenta de Facebook que la captura de alias Castor y su posible aprehensión no acabará con los problemas de inseguridad que azotan a Barranquilla.

“Es triste que mucha comete desplazamientos, roban tierras y asesinan, pero están como si nada, jugando billar porque tienen permiso de esos políticos. Muchas veces hemos querido salir de esta vida con alguna oportunidad que nos brinde el Estado para llegar a un buen acuerdo, pero siempre nos han cerrado las puertas”, publicó Palomino, cabecilla de la banda criminal Los Costeños y socio de ‘Castor’.

“Ayer (sábado) cayó Jorge Eliécer (Castor), pronto seré yo. Solo les digo que eso no acabará con la inseguridad. Muchos bandidos tienen privilegios”, continuó Palomino. “Solo esperaré tus instrucciones (las de Castor) para entregarme, como lo habíamos acordado meses atrás”.

Incertidumbre por su paradero

Todo el día de ayer medios de comunicación, locales y nacionales, estuvieron en la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía, sede centro de Barranquilla, a la espera de la llegada de Jorge Eliécer Díaz Collazos. Incluso, en el lugar estuvieron el padre y otros allegados al jefe de Los Costeños, pero todos se retiraron ante la falta de información de las autoridades.