“Mi hijo murió esperando una llamada para trabajar”, dijo Nubia Ester Marimón para referirse Brayan Daniel Escorcia, asesinado a puñal cuando intentaba mediar en una pelea entre conocidos.
El homicidio ocurrió a las 8:55 de la noche del pasado domingo en la calle 60 con carrera 9L, barrio El Bosque.
Según informó la Policía, Brayan Daniel, de 23 años, estaba departiendo con unos amigos en vía pública y de repente dos sujetos comenzaron una discusión que pasó a los golpes. El joven barranquillero intentó detener la riña, pero resultó apuñalado en el pecho.
Brayan sufrió una herida profunda que lo desangró y le causó la muerte antes de llegar al Paso El Bosque. “De acuerdo con información de la patrulla del cuadrante, Escorcia fue asesinado por un sujeto al que conocen como Kevin, lo cual es materia de investigación”, explicó la Policía Metropolitana.
‘MI HIJO ERA CONOCIDO EN EL BOSQUE’
Brayan Daniel Escorcia Marimón residía en la calle 70C No. 12A-186, Cuchilla de Villate, de donde salió el pasado domingo. “Se fue como a las 2:30 de la tarde, no se despidió ni dijo nada, igual yo sabía que visitaría a la novia en El Bosque”, comentó
Nubia Ester.
Al parecer Brayan Daniel no encontró a la novia en su vivienda y decidió quedarse en el sector, lo que resultaba normal, pues se crió en dicho barrio. “Hace cuatro años nos mudamos a Villate, nos vinimos de El Bosque”, continuó Nubia.
Después de varias horas de estar ingiriendo licor llegaron los problemas. “Se formó la pelea y lo que dicen los vecinos es que lo hirió un tal Kevin. Es raro todo lo que ocurrió, porque a él lo conocían por allá y nunca tuvo amenazas”, agregó Marimón.
Escorcia, soltero y mayor de cinco hermanos, estaba desempleado, aunque se rebuscaba en labores de oficios varios. Alcanzó a estudiar manejo de maquinaría pesada y estaba a la espera de ser llamado para trabajar.
“Sus últimos días giraron en torno a buscar empleo. Se la pasaba todos los días metiendo hojas de vida, pero nada que lo llamaban. Ojalá se haga justicia en su caso”, finalizó la madre.
“Lo vamos a recordar como un muchacho alegre, que se la pasaba cantando y al que le era fácil hacer amigos”, dijo una prima.