En barras de dulces y brownies, la banda denominada ‘los Barrios’, que tenía su centro de operaciones en un sector del norte de Barranquilla, camuflaba la marihuana que comercializaba a domicilio en sectores exclusivos de la ciudad.
Así lo estableció la Fiscalía tras una investigación que se extendió por tres meses en la capital del Atlántico y tres municipios del centro de Bolívar: San Jacinto, San Juan y El Carmen. Hasta estas poblaciones la red dedicada al microtráfico había extendido sus tentáculos.La organización tendría nexos con la banda delincuencial ‘los Pachenca’, de Santa Marta.
Los operativos los desarrollaron de manera conjunta la Fiscalía, ArmadaNacional y la Policía, con base en una denuncia ante el Batallón 13 de Infantería de la Armada Nacional. Posteriormente se realizaron varias diligencias técnicas que permitieron reunir suficiente material para solicitar las órdenes de captura contra las seis personas sindicadas ahora de los delitos de concierto para delinquir y narcotráfico.
Las cuatro mujeres y los dos hombres fueron detenidos el martes pasado en un apartamento del edificio Spartivento, situado en la carrera 52B No. 94-103, en el norte de Barranquilla.
Según el contralmirante Gabriel Alfonso Pérez Garcés, comandante de la Fuerza Naval del Caribe, los capturados pertenecerían a un clan familiar conocido como los ‘Barrios’ que, de acuerdo con las pesquisas, delinquían para la estructura criminal los ‘Pachenca’. Eran los encargados de la distribución de estupefacientes en zonas adineradas de Barranquilla y los municipios de Bolívar ya mencionados.
LOS CAPTURADOS
El oficial destacó que las acciones permitieron desmantelar esta red del microtráfico conformada por seis personas que fueron identificadas por las autoridades como Carlos Alfonso Barrios Roncallo, José Ángel Barrios Martínez, María José Acosta Suárez, Rosa María Roncallo Taboada y Filomena López Corrales.
“Esta red delincuencial estaba al mando de alias ‘Cafonso’. En vehículos de alta gama, la red llevaba a domicilio los dulces y brownies que eran pedidos previamente por parte de su clientela de los estratos altos, y de contactos que tenían en los municipios bolivarenses". Según el contraalmirante Pérez Garcés, la banda preparaba alimentos como brownies y dulces con marihuana.
“Todo estaba muy bien organizado y estructurado dentro de la organización”, explicó.
En Cartagena aún se cumplen las audiencias de los miembros de la banda.