La criminalidad que azota a Barranquilla tiene a los ciudadanos expectantes, sobre todo en la localidad suroriente, la que hace unos días fue golpeada con la aparición de un desmembrado, y que a las 3:25 de la tarde de este miércoles se estremeció de nuevo con el hallazgo de un cadáver que flotaba en el Caño de la Ahuyama, sector de la carrera 30 con calle 6.
La víctima reciente fue identificada como Rafael Sánchez, de 18 años. “Tenía varios días perdido, no sabíamos dónde andaba, solo se rumoraba que estaba en poder (secuestrado) de alias Brayita”, precisó Gleidys Benavides, prima del occiso.
El torso de Rafael lucía descubierto, dejaba ver la piel deteriorada por el proceso natural de descomposición. En la espalda no se evidenciaron heridas por arma blanca o balas, aunque la cabeza tenía signos de violencia que pudieron ser ocasionados por una caída accidental o un ataque.
La confusión en este caso radica, en parte, en que la Policía no confirmó si el fallecimiento obedecía a un accidente, con posible ahogamiento o un asesinato. Sea cual sea el motivo, el temor se apoderó de los habitantes del sector de La Loma, quienes muy cerca, en La Bendición de Dios, atestiguaron el domingo pasado la aparición de un desmembrado, Reinaldo Krautz Vibsal.
“Rafael no era de tener problemas con nadie. Su único mal era el problema con las drogas, pero hasta ahí, incluso por un tiempo se ganó la vida como bicicochero”, finalizó Benavides.