Penitenciaría de El Bosque todo volvió a la normalidad. Los internos levantaron la huelga de hambre que habían comenzado la tarde del martes, tras lograr un acuerdo con las directivas del centro penitenciario para recibir las visitas durante los fines de semana.
Luego de varias horas de negociación, las partes cerraron un pacto para aplicar otro esquema de ‘pico y placa’ para las visitas desde mañana.
Yolanda Fonseca, directora de la Penitenciaría de El Bosque, explicó que el ingreso de visitantes será por pabellones.
La funcionaria indicó que las mujeres entrarán los sábados a los pabellones A y B, mientras que los domingos les corresponderá a los reos de los pabellones C y D. El fin de semana siguiente, se hará a la inversa.
“El último fin de semana de cada mes serán las visitas de los hombres. El sábado para los pabellones A y B, mientras que el domingo ingresarán los familiares hombres de los reos en los pabellones C y D”, expuso Fonseca.
También puso de presente que la medida fue tomada debido al alto porcentaje de hacinamiento que existe en el centro penitenciario.
Según los datos de la Personería Distrital, en la Penitenciaría de El Bosque hay 1.766 internos, cuando su capacidad real es para 476 reos.
Jaime Sanjuan, personero del Distrito, reafirmó que se logró un acuerdo con los presos para permitir el ingreso de sus familiares.
“Se hará de forma sectorizada, debido a que el hacinamiento es grande. Hicimos presencia en la Penitenciaría, estuvimos vigilantes de lograr un acuerdo entre las partes”, aseveró el funcionario.
Sanjuan indicó que solo tres personas podrán ingresar del listado que entreguen los internos, dándole prelación a sus esposas e hijos. Anteriormente podían relacionar hasta diez familiares.
Puso de presente que el Inpec no cuenta con el personal suficiente para hacer las requisas de rigor para el ingreso a la Penitenciaría de El Bosque.
¿Qué dicen los reos?
Los internos de la Penitenciaría aseguraron que el acuerdo logrado es más beneficioso que el esquema que les querían imponer en un principio.
“Somos conscientes que somos muchos los que estamos acá adentro. Nosotros protestábamos porque nos querían poner las visitas cada 15 días y nos parecía injusto”, expuso uno de los reclusos.
Reafirmaron que no “estamos viviendo en las mejores condiciones”, teniendo en cuenta que muchos de ellos deben dormir en los pasillos por la falta de celdas.
Por esta razón, pidieron la intervención de las autoridades competentes, con el fin de que se pongan en marcha programas de resocialización y formación, con el fin de “ser útiles a la sociedad” al momento de abandonar el centro de reclusión.
Además, solicitaron a las directivas que el próximo 23 de septiembre se permita el ingreso de sus familiares para celebrar el día de Nuestra Señora de las Mercedes, patrona de los reos y el sistema penitenciario.
Megacárcel
La Nación, la Gobernación del Atlántico y el Distrito de Barranquilla firmaron un convenio para la realización de los estudios y diseños del complejo carcelario que se construirá en el departamento para resolver el problema de hacinamiento. El costo es de $400 mil millones.
El nuevo centro de reclusión tendría una capacidad que supera los 4.000 cupos y que de manera tentativa, del costo general, la Gobernación del Atlántico y el Distrito de Barranquilla aportarían $100 mil millones y la Nación los $300 mil millones restantes. La ejecución de la obra duraría cuatro años.