“Vi cuando la corriente se lo llevaba”: pareja del rector que murió por inmersión

Narlys Ríos, pareja de Humberto Jiménez Galindo, rector de la Institución Educativa Distrital de Las Nieves, relató los momentos de angustia y dolor que vivió este domingo 6 de noviembre, cuando vio que el mar de La Guajira se tragaba al hombre que estuvo a su lado en los últimos nueve años de su vida.

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“Yo vi cuando el agua se lo llevaba poquito a poquito. Él (Jiménez Galindo) quiso salir, pero no pudo devolverse, a pesar de no estar tan lejos, porque solo había de dos a tres metros de la orilla hasta donde él estaba. Sin embargo, el mar estaba bravo y fuerte”, contó la compañera.

Jiménez Galindo se encontraba disfrutando en un lugar llamado ‘El Pilón de Azúcar’, pero, en vista de que no salía, un docente del mismo plantel educativo, Édgar Ballestas, decidió arriesgar su vida para colocar a salvo a su compañero de trabajo, pero no pudo ser posible, pues también murió ahogado.

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Ríos expresó que viajar, explorar y conocer cada rincón del país, caracterizaba al rector de la IED Las Nieves. Estas oportunidades las aprovechaba en cada descanso, en compañía de ella, amigos y un círculo cercano de docentes.

Por tal razón, en la noche del viernes 4 de noviembre, el área administrativa y el cuerpo de docentes decidieron emprender su nuevo destino hacia el Departamento del norte del país, el cual había sido planeado meses atrás.

“Salimos en la noche y llegamos en la mañana del sábado, de ahí cogimos para el Cabo de la Vela, donde permanecimos unas horas. Al día siguiente cogimos a El Pilón de Azúcar, hicimos la excursión hasta subir a la montaña y luego llegar a la virgen”, narró Ríos a esta casa editorial.

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Después de dicho recorrido, “fuimos a la playa y como vimos que la gente se estaba bañando, ellos decidieron hacerlo. Unas compañeras y yo nos quedamos en la orilla (mar) porque no nos quisimos meter y allí es donde ocurrió la tragedia”, puntualizó la mujer con voz entrecortada.

Del mismo modo manifestó que el rescate se materializó una hora después de lo acontecido. “Cuando ocurre la emergencia no había un salvavidas, las lanchas demoraron para llegar”.