La Fiscalía Quinta Delegada ante los Jueces Penales del Circuito Especializado de Barranquilla hoy es la agencia fiscal encargada de retomar una investigación por el asesinato del abogado, docente, ganadero y presidente de Coolechera, Gustavo Alexis De Silvestri Saade, ocurrido el 10 de octubre de 2002 en el norte de la capital del Atlántico.
Hoy, cuando se conmemoran 20 años de ese trágico episodio, el ente investigador ha actuado con la apertura de indagaciones a viejos actores del paramilitarismo, en específico los que hacían parte del frente José Pablo Díaz del Bloque Norte de las AUC, cuya zona de injerencia era el departamento del Atlántico y poblaciones del norte del Magdalena.
Con el paso de los años y posterior a la desmovilización de las AUC, algunos ex miembros del grupo criminal, reconocieron haber cometido el asesinato de De Silvestri, pero ninguno dio las razones o los motivos, ni quién ordenó el crimen.
En ese sentido, desde el pasado mes de septiembre se dio inicio a la maratónica búsqueda de testimonios de postulados de Justicia y Paz para llegar a la verdad.
Este medio conoció que uno de los llamados a interrogatorio fue Darío Laino Scopetta, apodado Ojos Azules, quien, según declaraciones de Salvatore Mancuso, fue jefe de finanzas de las AUC en el Atlántico. Y la otra persona fue José Manuel Orozco Ovalle, un ex miembro de las AUC capturado en julio de 2021, en el sector de Villa Campestre, en Puerto Colombia.
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Ambos individuos, según las pesquisas que adelanta la Fiscalía, habrían dado la orden para que el entonces Bloque Norte de las AUC tomara por completo el control de Coolechera, cooperativa de la que hacía parte De Silvestri y que defendía, a toda costa, para que no fuera tomada por criminales.