En el corregimiento de Golondrinas, zona rural de Cali, las autoridades recuperaron un terreno de 50.000 metros cuadrados que había sido invadido para construir nada más y nada menos que una mansión de tres pisos con piscina, jacuzzi y parqueaderos.
La comunidad venía denunciando desde hace meses que el lote estaba siendo ocupado de manera irregular.
Tras las investigaciones, la Alcaldía confirmó que se trataba de un predio público en reserva forestal. Pese a que en marzo de 2024 ya se había ordenado suspender la obra, los responsables hicieron caso omiso y continuaron con la construcción.
La lujosa vivienda, valorada en 2.500 millones de pesos, fue entregada al municipio.
Ahora, la Fiscalía adelanta investigaciones contra los ocupantes ilegales que, según la Alcaldía, serán judicializados por invadir y apropiarse de un espacio público. “Hoy, tras agotar todas las instancias y fallos de tutela, logramos devolverle este predio a la ciudad”, dijo el subsecretario de Acceso a Servicios de Justicia, Luis Eduardo Varela.