¿El 'Negro Ober' tiene las fotos de sus víctimas como trofeos?
La Fiscalía pidió este martes 21 de mayo una nueva medida de aseguramiento contra el señalado cabecilla de los ‘Rastrojos-Costeños’ por casos de extorsiones a comerciantes del Atlántico y por los que ya fueron procesados nueve supuestos cómplices.
La Fiscalía solicitó una nueva medida de aseguramiento contra Ober Ricardo Martínez Gutiérrez, alias el ‘Negro Ober’, cabecilla de los ‘Rastrojos-Costeños’.
El proceso involucra extorsiones a cuatro comerciantes de Barranquilla, y ya se ha procesado a nueve cómplices.
La Fiscalía destacó la gravedad de los delitos imputados y justificó la necesidad de mantener a Martínez bajo estricta seguridad.
Una nueva medida de aseguramiento solicitó la Fiscalía contra Ober Ricardo Martínez Gutiérrez, alias el ‘Negro Ober’, cabecilla de la estructura los ‘Rastrojos-Costeños’, dentro de un proceso por casos de extorsiones a al menos cuatro comerciantes de Barranquilla y por el que ya fueron procesados nueve supuestos cómplices.
La diligencia se llevó a cabo este martes 21 de mayo ante el juez 101 Penal Municipal con funciones de Control de Garantías Ambulante de Barranquilla y en esta el ente investigador nuevamente justificó por qué un individuo como Ober Martínez debe permanecer tras las rejas y bajo estrictas medidas de seguridad.
Si bien la autoridad indicó que el cabecilla de la estructura criminal tiene cuatro medidas de aseguramiento y “no habría riesgo de que salga de la cárcel”, se reveló ante el representante del despacho el tiempo que tardó la administración de la justicia para imputarlo y para solicitar una nueva medida de aseguramiento en su contra.
“Seis meses se tardó para adelantar las diligencias”, primero por los traslados de Ober a distintos centros carcelarios por su “continua actividad delictiva” y segundo por disposición del propio procesado.
En su exposición, la agencia fiscal también demostró que a Ober no se le imputa un delito, “ni dos, ni tres, sino casi una decena de delitos de los más graves”.
“Ahora bien, más allá de la cantidad y naturaleza de sus delitos, lo cierto es que en el momento en el que se han cometido estas conductas violentas, se encuentra acreditado y documentado que estaba cobijado con una medida de detención vigente, que le había sido impuesta por dos delitos atroces, como son el concierto para delinquir agravados y el homicidio”, agregó el investigador.
“O pagas o mueres”
En plena Semana Santa, la Policía Metropolitana dio detalles de una operación llamada Magnus, en que se detuvieron 121 personas vinculadas a redes de extorsionistas en cuatro ciudades del país y en 12 Departamentos.
En dicha redada cayeron en distintos puntos del Atlántico nueve sujetos implicados, según la autoridad, en casos de intimidaciones a decenas de comerciantes de sectores populares de Barranquilla y su área metropolitana, pero además en tratar de ‘blanquear’ el dinero de Ober Martínez, producto de esa conducta criminal.
En su momento, las personas fueron identificadas como Eliany del Carmen Garizao Solórzano, Yesmin Adriana González Cabarcas, Luis Eduardo Acosta Enciso, Indira América Torres López, Alex Andrés Torregrosa Díaz, Lesvia Irene Cantillo Truyo, José Uriel Suaza Blandón, Jhol Freddy Núñez Gelvis y José Daniel Ávila Ruiz.
En extensas audiencias virtuales a las que tuvo acceso AL DÍA, se escuchó a la agencia fiscal demostrar a punta de ‘Big Data’ cómo cada uno de los procesados tenía flujos financieros ilícitos y supuestamente usaba plataformas virtuales para cruzar de un lado a otro la plata de Ober Martínez, preso actualmente en la Cárcel de Girón, Santander.
El rastreo contra el jefe de los Rastrojos-Costeños, según el ente investigador, empezó en octubre de 2022, después de la arremetida de este grupo criminal contra el gremio transportador de Barranquilla y Soledad, y contra distintos sectores de la economía local.
Ober estaba en la Cárcel La Picota (después de eso fue trasladado), y en un allanamiento uniformados del Grupo Gaula de la Policía le encontraron un celular marca Samsung y 25 gramos de marihuana.
En una inspección al aparato, peritos encontraron “notas de voz, formatos de transferencias virtuales y mensajes de texto” de los nueve imputados.
Entre dichos mensajes llamó la atención de los investigadores una conversación de Ober por mensajes de texto con la hoy detenida Yesmin Adriana González Cabarcas en la que este le proponía o “daba instrucciones” para que “descargara dos aplicaciones CLONNAPP y PARALLEL SPACE con el propósito de crear múltiples cuentas” de la plataforma financiera digital Nequi con un solo dispositivo móvil.
En esa línea, el capturado habría recibido directamente, solo de esa capturada, 30 millonariosgiros a una cuenta bancaria a su nombre.
“Fue el receptor directo, contravino la norma financiera y violó el sistema financiero colombiano al estar tras las rejas”, expuso el fiscal en audiencia, mientras juez, procesados y abogados escucharon de manera virtual.
Pero además el investigador globalizó el número de transacciones que este sujeto habría tenido con toda la estructura entre ese mes de octubre de 2022 y febrero de 2023, llegando a contabilizar 233 transacciones o transferencias de dinero vía Nequi en ese lapso.
“Conformó, promovió y lideró una verdadera estructura criminal, pese a estar tras las rejas, que exigía a comerciantes hasta 20 millones de pesos a través de sus emisarios…”, señaló la Fiscalía.
De acuerdo con el investigador, “de 2 a 20 millones de pesos exigía a comerciantes de Barranquilla y el departamento del Atlántico, así como al gerente de una estación de gasolina, para no atentar contra su patrimonio o sus vidas”.
En ese análisis del aparato celular también se obtuvo como material probatorio un mensaje enviado a una víctima en el que Ober, al parecer, expresa: “que yo esté preso no le impide que me pague las extorsiones…”.
Fotos de cada muerto
Pero este martes 21 de mayo, la Fiscalía volvió a descubrir información relacionada con la investigación y allí citó la frase: “o pagas o mueres”, con la que supuestamente Ober intimidaba a sus víctimas.
“En ese análisis a su celular se encontraron fotografías de cada muerto, de sus víctimas de extorsión. Las tiene como trofeos…”, expresó el investigador.
Al cierre de la diligencia, el juez ordenó un aplazamiento por solicitud de la defensa del procesado, que lo justificó por el estudio de la carpeta de la investigación en contra de su defendido.