Con restos óseos al aire libre deben toparse las personas que visitan diariamente el cementerio municipal de El Copey, ubicado en la calle 8 del barrio San Roque, ya que el hacinamiento de cadáveres que este presenta y el abandono en el que se encuentra, ha ocasionado el deterioro de las bóvedas, según manifiestan habitantes del sector.
Por no haber un espacio donde sepultar a sus seres queridos, deciden sacar los restos de las bóvedas que se encuentran en abandono y deterioradas, y encima de esas construyen una nueva, dejando esos restos en cualquier lugar del cementerio, expresó un habitante de dicho municipio, quien prefirió no revelar su nombre por seguridad.
FECHORÍAS EN EL CAMPOSANTO
Cementrerio del Copey
La falta de limpieza al camposanto, por parte de las autoridades municipales, ha ocasionado que consumidores de alucinógenos utilicen este lugar para hacer sus fechorías.
"Unos jóvenes que consumen drogas se metieron al cementerio, empezaron a brincar encima de una bóveda y la reventaron toda, quedó escueta y todo el que entra se da cuenta del cadáver que permanece allí, en otro lugar del cementerio hay una calavera también, los malos olores de los cuerpos que se están descomponiendo están afectando cada vez más a los vecinos", aseguró el denunciante.
Sin embargo, según explicó el secretario de Planeación de El Copey, Álex Banderas, en dicho municipio existe un lote de cinco hectáreas destinado para la construcción de un cementerio nuevo, pero el proyecto fue rechazado por la Ocad departamental, es decir, los Órganos Colegiados de Administración y Decisión, al parecer porque este supera los seis mil millones de pesos.
"El problema que se presenta es por el hacinamiento y la única solución que hay es la construcción del nuevo cementerio, porque esta es una situación que no se presenta desde ahora, sino desde hace más de cinco años", sostuvo.
“ÚNICA SOLUCIÓN, CONSTRUIR UNO NUEVO”
Pese a los diferentes llamados que la comunidad ha realizado a las autoridades municipales, por el problema sanitario que se presentan en este lugar, la secretaria de Salud departamental, Carmen Sofía Daza, aseguró que "se han venido realizando visitas de inspección, vigilancia y control al cementerio de El Copey, donde se pudo concluir que este no tiene área física para ampliación, ni construcción de áreas de obligatorio cumplimiento sanitario". La funcionaria también agregó, que la única salida es la construcción de un nuevo cementerio que cumpla con todos los requisitos que debe tener y con una capacidad proyectada a largo plazo.
Aunque el gobernador del Cesar, Francisco Ovalle Angarita, hace parte de los Órganos Colegiados de Administración y Decisión a nivel departamental, manifestó no saber nada del tema y por ende se negó a entregar cualquier tipo de declaraciones.
Entre tanto, la comunidad se encuentra a la espera de una solución definitiva para esta problemática, además de exigir un poco más de respeto y consideración por este lugar.