Aunque se han producido accidentes fatales que vinculan a entidades deportivas a lo largo de la historia de la aviación, el accidente aéreo del club brasileño Chapecoense no tiene precedentes por tres factores combinados: su magnitud (76 muertos), el ascenso deportivo del club, que jugaba en la División D hace apenas 3 años, y por la instancia definitiva a la que viajaba, su primera final internacional luego de semejante escalada de triunfos.
Tal vez por eso Caio Junior, su Director Técnico, dijo cuando pasó a la final (en una frase que hoy resulta horriblemente premonitoria) "Si muriera hoy, sería feliz".
Cuando el mundo se solidariza con los familiares de los fallecidos y apenas se busca establecer la causa de la tragedia, la Conmebol decidió suspender cualquier actividad deportiva para el día de mañana, cuando se disputaría la primera final de la Copa Sudamericana.
A propósito de esta cita que quedará pendiente para siempre, unas horas después de la catástrofe, Atlético Nacional, en un gesto de grandeza y solidaridad, pide que la Conmebol le entregue el título de la Copa Sudamericana 2016 al club brasileño. Estas fueron las palabras de Gilberto Alcatraz Garcia.
A las palabras del jugador se sumaron otros como Ezequiel Rescaldani. "Nos decían que eso queda en las manos de la Conmebol porque uno nunca sabe en qué puede terminar esto. En un principio, la idea de Nacional es cederle el campeonato a Chapecoense, lo que me parece una buena decisión y estamos todos de acuerdo", dijo el delantero argentino.
El comunicado oficial de Atlético Nacional es el siguiente:
"Atlético Nacional solicita a Conmebol que el título de la Sudamericana sea entregado a Chapecoense.
El dolor embarga rotundamente nuestros corazones e invade de luto nuestro pensamiento. Han sido horas lamentables en las que hemos estado consternados con una noticia que nunca quisimos haber escuchado. El accidente de nuestros hermanos del fútbol de Chapecoense nos marcará de por vida y desde ya dejará una huella imborrable en el fútbol latinoamericano y mundial. Todo esto ha sido completamente inesperado, por eso el dolor. Se trataban todos ellos, futbolistas, Cuerpo Técnico, periodistas y tripulación, de personas con muchos sueños, por eso el llanto.
El lamento mundial se ha hecho extensivo también a toda la familia Verdolaga quienes desde sus patrocinadores, su Junta Directiva, su Cuerpo Técnico, sus jugadores, su parte administrativa y su afición, han manifestado el desconsuelo y la desazón por lo absurdo. La solidaridad no se hizo esperar y de nuestra parte acompañamos de forma rotunda el padecimiento de todos los hermanos que nos abandonaron quienes junto a sus familiares y nosotros, compartíamos una ilusión grande de ser campeones continentales de la Copa Sudamericana.
Luego de estar muy preocupados por la parte humana pensamos en el aspecto competitivo y queremos publicar este comunicado en donde Atlético Nacional invita a Conmebol a que el título de la Copa Sudamericana le sea entregado a la Associacao Chapecoense de Futebol como laurel honorífico a su gran pérdida y en homenaje póstumo a las víctimas del fatal accidente que enluta nuestro deporte. De nuestra parte, y para siempre, Chapecoense Campeón de la Copa Sudamericana 2016."
La Conmebol tiene la última palabra, pues hay comprometidos en el título beneficios comerciales y deportivos que se deben evaluar. Se abre también la posibilidad de que el campeonato tenga dos campeones.