Si alguna vez mataste a una abeja aceleraste la extinción de la humanidad
Las abejas se están extinguiendo frente a nuestros ojos y pocos saben las consecuencias que traería para la existencia de la civilización tal como la conocemos hoy.
La abejas es uno de los animales más importante para la existencia del ser humano. ¿Por qué? Bueno, ellas -junto a otros insectos y animales- son quienes polinizan miles de millones de plantas que permiten la existencia de las frutas y animales que ves todos los días en tu casa o en tu plato. Pero desde 1993 los apicultores europeos comenzaron a advertir del peligro de que miles de especies de abejas desaparezcan. Por ejemplo, así se vería la cadena alimenticia sin abejas:
Así es, según múltiples estudios la población de abejas ha disminuido considerablemente en países industrializados como Estados Unidos, donde se redujo en un 30%; en Europa un 53 %; Japón 25 % y Medio Oriente en un asombroso 85%.
En Colombia el panorama es diferente –aunque no se puede cantar victoria-, “Colombia cuenta con muchos monocultivos extensivos y todavía tenemos una biodiversidad interesante, las abejas están relativamente bien”, dijo Judith Figueroa, profesora de la Universidad Nacional de Colombia para El Diario del Otún.
Para Green Peace son varios los factores que están llevando a las abejas a su declive: “la pérdida de hábitats, las prácticas de la agricultura industrializada, como los monocultivos (menor disponibilidad y diversidad de alimento para estos insectos), el uso de plaguicidas; parásitos y enfermedades; especies vegetales y animales invasoras; y los impactos del cambio climático”, publicaron en su página de internet sobre la desaparición del pequeño insecto.
Si se piensa bien, un mundo sin abejas sería un lugar sin flores, sin alimentos y muy seguramente un sitio muy complicado para la existencia del ser humano como lo conocemos hoy. Ya sabes, si una abeja se acerca a ti no la mates, nos matas a todos un poquito 
