Del amor al celular y otras adicciones que están acabando con las relaciones personales
Expertos dicen que las personas nacidas desde 1980 hasta ahora son las que más dependen de su dispositivo.
Dicen que las cuatro necesidades básicas de todo humano son: el alimento, la vivienda, la salud y la educación. Pero esa ecuación fue cambiada y se le agregó un nuevo elemento, el CELULAR. El dispositivo móvil se ha vuelto tan indispensable como el aire que respiramos.
[VER: ¿Sufren de nomofobia? La adicción a estar siempre conectado al celular]
Expertos dicen que, los que más dependen del celular son los conocidos Generación Y, Z y Touch, esto es todo ser humano nacido desde 1980 hasta ahora.
Y ¿cómo no amarlo? muchos se preguntarán, cómo un "insignificante" aparato, dirían muchos, puede hacer tantas cosas, tales como: dar la hora; despertar a las personas con la alarma, comunicar a dos personas en cualquier parte del globo terráqueo; guardar memorias, como imágenes y videos; encontrar toda la música que te gusta; redactar una presentación para el trabajo e inclusive conseguir citas amorosas.
¿Cuál es el problema? no lo dejamos ni para ir al baño. Acorde a la firma privada Deloitte, más del 40% de las personas, al levantarse miran el celular. Además, durante el día, el humano promedio ve el celular 47 veces, pero los jóvenes entre los 18 y 24, lo ven 82 veces.
En el pasado, se les ponía nombre a los osos de peluches o muñecas, hoy les decimos a los celulares “ay mi bebé”.
Esta adicción está deteriorando muchas vidas amorosas. En inglés existe una palabra que se usa para las personas que ignoran a su pareja por andar con el celular y ella es phubbing. La palabra aún no está avalada por la Real Academia Española (RAE), pero fue un término que nació en Australia en 2007.
[VER: 9 cosas que hacemos con nuestro celular que puede acabar relaciones]
En un artículo de New York Times por medio de unos ítems, se les recomienda a las personas que se encuentran en esta situación, a que sigan los siguientes consejos:
- Designen zonas de la casa o el carro, fuera de tecnología para que se sienten a hablar y la interacción sea amena, sin interrupciones.
- La habitación se hizo para dormir, intenta un periodo de tiempo estar en el cuarto sin un dispositivo móvil.
- A la hora de comer, díganle ¡chao! de manera temporal, al celular, así como en la habitación, usen este tiempo para digerir bien la comida y para descansar la mente.
- Anuncien que van a usar el celular, solo si es estrictamente necesario.