En un país como Colombia, en donde todo está regulado pero nada controlado, ha causado gran polémica la resolución firmada la semana pasada por el presidente Juan Manuel Santos sobre la producción, calidad y distribución de las bolsas plásticas, como medida para proteger el ambiente.
Las primeras en mostrarse renuentes en torno a dejar de utilizar las bolsas plásticas fue un amplio sector de amas de casa, que en su mayoría las usan cuando hacen mercado o van a comprar cualquier producto en la tienda de la esquina. A ellas se unieron las empresas o industrias que las producen, que sostienen que “la culpa no es de la bolsa, sino de la la gente que no deposita en lugares adecuados este tipo de producto luego de ser utilizado”.
En Barranquilla, al igual que en las grandes capitales del mundo, se pueden observar promontorios de bolsas plásticas con desechos sólidos o basuras. Si bien es cierto que son llevadas a rellenos sanitarios, algunas veces son arrojadas por inescrupulosos a los arroyos y ríos. | ALDIA
El presidente Juan Manuel Santos se pronunció igualmente sobre la regulación del uso de bolsas plásticas en Colombia, como medida para salvaguardar la riqueza natural del país, así como para aportar al planeta en la lucha por proteger su fauna y flora. El mandatario, que firmó la semana pasada el Acuerdo de París sobre el Cambio Climático, anunció la puesta en marcha de la campaña ‘Reembólsale al Planeta’, que busca controlar la producción, calidad y distribución de bolsas plásticas.
“Estas bolsas tardan siglos en degradarse y la mayoría acaban en nuestros océanos y ríos con un efecto devastador”, explicó Santos al terciar en la polémica. Son tres las medidas amigables con el ambiente anunciadas por el mandatario:
Las bolsas pequeñas (menores de 30x30 centímetros) saldrán de circulación. \t
Las bolsas deberán ser más resistentes para empacar, esto es un llamado a los almacenes de grandes superficies. \t
Las bolsas deberán tener mensajes invitando al uso responsable y a no usar, por ejemplo, doble bolsa para empacar. El Gobierno dio a conocer cifras sobre el consumo de bolsas plásticas en el país. De acuerdo con sus estadísticas, un colombiano usa seis bolsas plásticas a la semana, unas 288 al año. “Eso es demasiado y es innecesario si pensamos en que existen alternativas, como las bolsas de tela”, subrayó Santos. La campaña ya comenzó a desarrollarse en 70 países y fue creada por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).
INCENTIVOS
Algunos almacenes de cadena están ofreciendo incentivos a los usuarios que no se lleven los productos que compran en bolsas plásticas. “Les hacen un descuento del 10% del valor del producto que adquieran, siempre y cuando no usen bolsas plásticas”, dijo Cristina Amell, un ama de casa que ayer compró un par de zapatos en un almacén del centro de la ciudad. En las principales capitales del país, uno que otro almacén de cadena está ofreciendo a los compradores bolsas reutilizables o biodegradables para empacar los productos.
Sin embargo, los usuarios aún no se han volcado a adquirirlas. En Barranquilla, por ejemplo, entre viernes y sábado se observó a muchas personas llevando alimentos, productos y artículos en bolsas plásticas, a pesar de que la campaña ‘Reembólsale al Planeta’ comenzó el jueves pasado.
LO QUE DICE ACOPLÁSTICOS
Carlos Alberto Garay, presidente de Acoplásticos (Asociación Colombiana de Industrias Plásticas), dijo que la raíz de la situación está en la poca conciencia ambiental de las personas. “Las bolsas no tienen la culpa, estas no se van a buscar a la tortuga al mar ni a los peces en los ríos. Eso es consecuencia de un inadecuado comportamiento ciudadano. La gente no deposita adecuadamente estos productos luego de ser utilizados, ese es el gran problema”, enfatizó Garay.
Agregó que hay que tener mucho cuidado con el tipo de bolsa.
“Las bolsas de la basura también tienen plástico, y si esas no se usan habría que volver a la época de las canecas metálicas que, para limpiarlas, hay que hacer un consumo significativo de agua y jabón”, puntualizó.
De acuerdo con sus estadísticas, un colombiano usa seis bolsas plásticas a la semana, unas 288 al año | ALDIA
La vida útil de una bolsa de plástico es de 20 minutos y su uso por las personas, expresó Garay, debe ser mínimo 15 veces por unidad.
Guillermo Botero, presidente de Fenalco (Federación Nacional de Comerciantes), se sumó a la controversia y señaló que “el consumidor es definitivo, debemos convencer a los clientes sobre el buen uso de las bolsas. Se debe tener en cuenta que no es un mal servicio que el comercio no le ofrezca la bolsa al cliente ni le dé dos o tres bolsas más para empacar un producto”.
LA POSICIÓN DE LOS ECOLOGISTAS
La voz de los ambientalistas también se hizo sentir en esta polémica. El grupo Ecología Verde sostiene que “las bolsas de plástico consumen grandes cantidades de energía para su fabricación y están compuestas de sustancias derivadas del petróleo que pueden tardar en degradarse más de medio siglo. Asimismo, las bolsas serigrafiadas pueden contener residuos metálicos tóxicos”.
De igual modo asegura en su portal web que “la gran mayoría de las bolsas acaba siendo desechada sin control, contaminando ciudades y ecosistemas. En el mar su impacto puede ser letal para animales como tortugas, ballenas o delfines, que mueren tras ingerirlas”.
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