Cabe preguntarse: ¿si el problema es la generación de juego, qué responsabilidad le cabe a James? Es que los responsables se han turnado comenzando por los delanteros y James siempre ha pasado de agache. Ver: Vuelve y juega... James se quejó de la cancha del Metropolitano
Siendo capitán, inamovible, irremplazable, súper figura del fútbol europeo, James no ha pesado en los últimos juegos. Se volvió liviano. Unas veces ha estado con Cardona, o con Macnelly, o con Muriel o con Berrío como esta tarde y los culpables son los otros. Pero ¿y él?
James tras el empate de la Selección Colombia con Chile | Archivo
¿Dónde está el peso específico de James en los últimos juegos? ¿Qué tanto ha pesado James para que Colombia no esté padeciendo como lo ha venido haciendo en este clasificatorio?
En los últimos juegos evidentemente la atención se ha centrado en Bacca y su poca frecuencia goleadora, en la lentitud de Macnelly, en la falta de salida de los laterales, en el poco oficio de quienes han tapado por las bandas o la gordura y la lentitud de Cardona. James ha pasado agachado, repito.
La verdad muy poco, pero muy poco, está aportando James en la creación y generación del juego y hasta su frecuencia goleadora se volvió nula. Porque no solo son los delanteros quienes pueden anotar. En otras jornadas James y Cardona lo han hecho para ganar, incluso.
Hace mucho tiempo que James se borró. Como se borró esta tarde ante los chilenos. Tomar el balón, darse la vuelta y patear al arco con mala puntería se volvió típico en él. No pesa, no hace la diferencia.
Y ahora Argentina como visitante. A remar contra la corriente. Pero generando fútbol. No hay otra forma, ni otra manera…