Nos sentamos hablar de Colombia, la vida y el fútbol con el presidente de la Fifa

Alegre, carismático y sencillo. Esa fue la imagen que dejó

Gianni Infantino

, presidente de la Fifa, en su visita a Colombia. No es el típico dirigente serio, al que no le gusta que se le acerquen, tomando como excusa la importancia de su cargo. Este, por el contrario, le gusta interactuar con todos. Habla, ríe, opina y comenta de todo.

Con esa misma sencillez, sacó tiempo en su apretada agenda para dialogar de forma exclusiva con

EL HERALDO

y

AL DÍA

, luego de la presentación formal de la nueva sede administrativa de la Federación Colombiana de Fútbol.

¿Qué balance hace de esta visita?

Ha sido muy positiva. Colombia es un país que respira fútbol y eso es muy lindo, muy importante. Acaban de organizar de forma exitosa un Mundial de Fútbol Sala y ahora inauguran una sede administrativa muy linda, muy completa, que habla muy bien de lo organizado que están. Están haciendo un gran trabajo de la mano de su presidente (de la Federación Colombiana de Fútbol), Ramón Jesurum. Creo que el futuro del fútbol en Colombia está en muy buenas manos.

¿Cómo ve a Colombia en el ámbito deportivo?

Muy bien. La Selección Colombia tiene jugadores de absoluta clase mundial, es un equipazo de verdad. Creo que vamos disfrutar del juego de Colombia por muchos años, porque la labor que están realizando en todos los aspectos es muy buena y se está viendo reflejada en todos los campos, el deportivo y el administrativo.

¿Qué conoce del fútbol colombiano?

Es muy competitivo y ha ido creciendo en el último año, eso se está viendo reflejado en los resultados que han obtenido sus clubes en los últimos torneos continentales. Hoy vemos a Atlético Nacional que acaba de coronarse campeón de la Copa Libertadores y Santa Fe obtuvo la Sudamericana el año anterior. Ahora sumemos que en la presente edición de la Sudamericana Colombia es el país que más equipos aporta en la fase de cuartos de final con tres (Nacional, Medellín y Junior). Eso te dice algo, eso te muestra que las cosas se están haciendo bien. El presente del fútbol colombiano genera mucha ilusión.

Colombia ya organizó un mundial sub-20, en 2001, y un mundial de fútbol sala, en este 2016. ¿Desde su punto de vista, está preparado nuestro país para soñar en un futuro con ser sede de un mundial de mayores?

Colombia ya ha organizado dos torneos importantes y ha demostrado capacidad para sacarlos adelante con mucho éxito. El Mundial de mayores quizá está bastante lejos, pero Colombia es un país de fútbol y, por qué no, claro que puede soñar con eso en el futuro, más ahora que queremos incrementar el número de países en un torneo. Un Mundial es difícil organizarlo solo en un país, somos muy exigentes en infraestructura, en estadios, así que también se puede valorar la posibilidad de organizarlo conjuntamente con otro país.

Infantino compartió con los niños en Bogotá.

¿Hay algún jugador colombiano que le seduzca particularmente?

El 'Pibe' Valderrama, es la leyenda del fútbol de Colombia, el más grande. Pero en la actualidad también hay excelente jugadores como James y Falcao. Colombia le ha aportado excelente futbolistas a este lindo deporte, pero el 'Pibe' es el gran embajador.

¿Tuvo la oportunidad de dialogar con 'el pibe' en esta visita?

Sí, hemos hablado un ratico. Muy buena persona. Demuestra que es un crack dentro y fuera de la cancha. Al 'Pibe' le envidio dos cosas, la cabellera y el fútbol (risas).

¿Cómo visualiza el presente y el futuro de la Fifa bajo su mando?

Hay mucho trabajo por hacer. La Fifa la pasó bastante mal y ahora trabajamos para salir de este duro momento. Creo que lo más importante es que en la Fifa se empiece a hablar de fútbol y no de política. Si podemos hacer esto, vamos a ganar este duro partido.

Por todo el escándalo que se ha vivido en el último tiempo (denominado el 'fifagate') es importante esa unión que se está viendo reflejada actualmente entre la Fifa y la Conmebol…

Es muy importante. Esta es una nueva Fifa y una nueva Conmebol, y es importante que trabajemos juntos por el fútbol, no por nosotros. Nuestro papel es únicamente cuidar del fútbol. Estoy muy contento con el trabajo que está realizando Alejandro Domínguez como presidente de la Conmebol y también con la labor que están desempeñando todos los presidentes de las federaciones.

Una labor muy dura, porque toca reconstruir una imagen de credibilidad ante el mundo…

Muy dura, es verdad, pero no la veo como una labor, es una pasión y sé que vamos a sacar esto adelante con el apoyo de todos.

Usted, como presidente de la Fifa, busca impulsar la idea de tener más equipos en los mundiales. ¿Cuál es el objetivo de esta propuesta?

Hay distintas propuestas y esta es una de ellas. Yo creo que entre más equipos tengan los mundiales se promociona más el fútbol. El Mundial no es solo un torneo, es un evento social que reúne a muchos actores. Ya hay una propuesta para un Mundial con 40 equipos y otra con 48, con diferentes sistemas. Esperamos sacarlas adelante.

¿Qué opina de los cambios que quiere implementar la Conmebol en sus dos torneos (la copa libertadores y la copa sudamericana)?

Estoy seguro que serán para mejorar. La labor de Alejandro Domínguez como presidente es muy buena y seguro que estos cambios beneficiarán no solo el espectáculo sino la calidad de vida del jugador.

¿Cómo es un día como presidente de la Fifa?

(Risas) muy ocupado, lleno de tantas cosas, pero bueno, trato de disfrutar mi trabajo, porque me apasiona. Cumplo con muchos compromisos y me queda muy poco tiempo para mis cosas personales, igual siempre se saca tiempo. La vida y el fútbol que disfrutarla.

¿Con esa agenda tan apretada, tiene tiempo para ver fútbol?

No todo el tiempo que me gustaría, pero sí, claro que saco tiempo para ver fútbol, no solo profesional, también de niños y niñas. Esta es mi pasión y disfruto haciéndola.

¿Practica el fútbol?

Sí, claro, desafortunadamente soy un jugador muy terrible, peor que mal (risas), pero me gusta practicarlo. Esa también es la magia del fútbol, que todos pueden jugarlo y cuando marcas un gol, ya sea en la final de un Mundial o jugando con tus amigos, sientes la misma emoción.