El volante creativo colombo-venezolano, campeón con Tolima en el primer semestre de 2018, llegará este viernes a Barranquilla para presentar exámenes médicos. Viene procedente del Puebla de México.
El Junior te da sorpresas, sorpresas te da Junior… El ritmo de Rubén Blades y parafrasear un estribillo de una de sus célebres canciones, ‘Pedro navaja’, puede ser la banda sonora de esta historia que la hinchada espera que tenga un final feliz: la llegada del colombo-venezolano Yohandry Orozco como refuerzo de los Tiburones. El volante creativo llegará este viernes a Barranquilla para presentar exámenes médicos y finiquitar su vinculación con los rojiblancos, informó a AL DÍA una fuente de entero crédito.
Julio Avelino Comesaña miraba pa’ un lado, miraba pa’ el otro, y no veía a nadie. No se asomaba ninguna cara nueva en la sede de práctica en Sabanilla. Ni siquiera había rumores. Cuando ya parecía que el libro de pases rojiblanco estaba completamente cerrado y el técnico se resignaba a jugársela con el plantel que tiene hasta ahora, se abrió una gran posibilidad de incorporar un jugador con experiencia y calidad como el volante ofensivo Yohandry José Orozco Cujía, campeón con el Deportes Tolima en el primer semestre de 2018.
“¿Cómo así? ¿Cuándo? ¿Dónde?”… La sorpresiva noticia se empezó a mover en redes sociales y pocos le daban crédito. “¡Bah! ¡Puro humo! ¡Ya hay cuatro extranjeros!”, descartaban sin leer explicaciones, haciendo alusión a que en el fútbol colombiano solo se pueden inscribir ante Dimayor cuatro jugadores foráneos por club (solo tres pueden estar en la cancha al mismo tiempo) y Junior ya tenía su cupo lleno con el uruguayo Sebastián Viera, el chileno Matías Fernández y los venezolanos Luis ‘Cariaco’ González y Edder Farías.
Sin embargo, Yohandry es colombo-venezolano.
Sangre barranquillera
El mediocampista creativo nació en Maracaibo el 19 de marzo de 1991 (hace 28 años, 4 meses y 14 días) y ha jugado muchas veces en la selección vinotinto, pero puede ser inscrito como futbolista nacional porque sus padres son 100% del país de la cumbia, el sombrero vueltiao y el mejor café del mundo. Es decir, tiene doble nacionalidad.
Yohandry es hijo del barranquillero Sadys Orozco Medrano y la marabina de padres guajiros, María Eugenia Cujía.
“Tiene raíces colombianas por todos lados. Sus abuelos maternos y paternos son de Villanueva (La Guajira) y yo soy de Barranquilla”, dijo orgulloso Sadys, en una entrevista concedida a EL HERALDO en enero de 2011, luego de que su retoño anotara un gol ‘maradoniano’ que dio mucho de qué hablar durante su destacada participación en el Torneo Sudamericano Sub-20 de ese año en Perú.
Sadys nació hace 52 años en La Arenosa y sus padres se lo llevaron al país vecino a muy corta edad. Allá conoció a María Eugenia y formaron una familia de la que surgieron tres hijos: Sadys Carlos, de 32 años de edad, Devanis, de 30, y Yohandry, de 28.
Se residenciaron en el populoso barrio de Maracaibo, Cardenal Norte, conocido por su alta peligrosidad y por la masiva presencia de colombianos, la mayoría procedentes de la región Caribe.
Sadys, hincha del Junior, a pesar de las distancias, les inculcó a sus hijos el amor a la camiseta rojiblanca y por el fútbol.
“Yohandry tiene cosas de ‘Pachequito’ (Víctor Pacheco), es muy ágil y elegante para jugar. Todo eso es de la sangre barranquillera, juega igual que lo hacía yo”, destacó su padre, que estuvo a punto de jugar profesionalmente con la ayuda del cantante Rafael Orozco (q.e.p.d), que fue su amigo y lo estaba recomendando en el desaparecido Sporting de Barranquilla hasta que las balas apagaron la vida del artista.
El padre del jugador confesó en 2011 que soñaba con ver jugar a su benjamín en el cuadro tiburón, equipo al que Yohandry vio cuando sólo tenía 12 años de edad, durante su primera estancia en la capital del Atlántico, donde visitó a los tíos y primos que todavía viven en los barrios Carrizal y Los Almendros.
“Siempre que voy a Barranquilla me pide la camiseta del Junior”, dijo Sadys en aquella ocasión.
Lo que falta
Para que Yohandry sea oficialmente miembro de Junior y cumpla el viejo anhelo de su papá, falta un pasito. Ya existe un pleno acuerdo entre el jugador, su representante y el club caribeño. El Puebla de México, equipo donde venía militando después de brillar en el Deportes Tolima, ya le dio luz verde. Solo falta que presente los exámenes médicos, que los supere, y que firme su contrato con la institución tiburona.
El mediocampista, que comenzó su carrera en Unión Atlético Maracaibo, en su país de nacimiento, aterrizó en el balompié azteca a comienzos de este año, pero tuvo poca continuidad. Solo disputó siete juegos (cinco de Liga y dos de Copa MX). Apenas anotó un gol.
No obstante, en el cuadro pijao se convirtió en figura con su zurda hábil, su panorama de juego, encare y fortísimo disparo. Fue pieza clave en la consecución del título en el primer semestre de 2018 y afianzó una buena sociedad con ‘Cariaco’ González, con quien se reencontraría en Junior.
Yohandry Orozco surgió en las canteras del Unión Atlético Maracaibo, luego pasó por el Zulia FC y fue transferido al Wolfsburgo de Alemania tras de brillar en el Torneo Sudamericano Sub-20 Perú-2011. Antes de integrarse al conjunto ibaguereño en 2018, hizo parte del Deportivo Táchira, Al-Ittihad (Arabia Saudita), New York Cosmos y de nuevo del Zulia FC.
Lo que dice Comesaña
El entrenador de Junior todavía no se ha pronunciado públicamente sobre el probable arribo de Orozco, pero AL DÍA conoció que el colombo-uruguayo lo ve con buenos ojos y que valora en él que sus condiciones son las de un volante creativo moderno, que tiene movilidad y sacrificio.
La llegada de Orozco podría significar la partida de Roger Torres al Independiente Santa Fe, equipo que ha mostrado algún interés por el volante zurdo de Barrancabermeja.
Sí, el Junior te da sorpresas, sorpresas te da Junior… Yohandry Orozco es la última.