Para muchos hinchas de Junior es raro no ver jugar a Iván Vélez.Desde su llegada al conjunto currambero en el 2012 el lateral derecho vallecaucano se ha convertido en uno de los referentes del equipo. Tras su larga lesión de rodilla que lo mantuvo 18 meses fuera de las canchas, Vélez nunca estuvo tanto tiempo por fuera de la alineación titular. El defensor inició este torneo jugando, pero tras la expulsión ante Patriotas el 14 de febrero, no volvió a ser tenido en cuenta. El técnico echó mano de David Murillo, y el joven jugador ha cumplido un excelente papel.
A pesar de eso, al experimentado jugador nunca se le ha visto un mal gesto por ser suplente, por el contrario, se mantuvo trabajando para buscar recuperar el puesto. Por lo visto en las prácticas de esta semana, el defensor podría retornar a la titular rojiblanca mañana en el duelo ante Chicó.
¿Cómo han sido estos dos meses sin jugar?
Cuando uno está acostumbrado a jugar estos momentos son difíciles. Yo viví una larga lesión en mi carrera y a raíz de eso aprendí a tener paciencia. Después de eso volví a retomar el ritmo, participé de un título de Copa y de un subtítulo de Liga y siento que aún estoy para dar la pelea y mantenerme en alto rendimiento y duele no jugar. Pero bueno, acá por una expulsión, la primera que me pasaba acá en Junior, el profe tuvo la oportunidad de darles minutos a David (Murillo) para que se mostrara y es lo más normal. Yo siempre quiero dar lo mejor y en el día a día me preparo para darlo todo. No han sido fáciles estos dos meses, pero tampoco es algo para enloquecerse.
¿Qué ha aprendido de esta experiencia?
A trabajar porque uno siempre tiene que tener la cabeza bien puesta y con miras a estar listo para aprovechar la oportunidad que se presente, ya que si Dios quiere que se de este día sábado no tengo que salir a hacer nada diferente a lo que conocen de Iván Vélez. Todos saben lo que puedo dar como jugador y como es mi comportamiento personal que influye mucho para vivir esta clase de momentos. La idea es tratar de no desentonar en el equipo y seguirle el ritmo porque hemos demostrado que tenemos como pelear el campeonato manteniéndonos en los primeros lugares de cara a la recta final del torneo. Hay que tener la cabeza bien puesta, prepararse siempre de la mejor manera y esperar la oportunidad. No hay de otra.
¿Qué le dice el entrenador Alexis Mendoza?
Una vez hablamos y me dijo que no me fuera a preocupar pensando que estaba haciendo las cosas mal. Yo no salí del equipo por bajo rendimiento sino por la expulsión. Después del partido con Santa Fe me dijo que estuviera tranquilo y trabajando que seguramente en algún momento me tocaría la oportunidad. Él me pide que le de al equipo lo que se conoce de mí, ser fuerte en marca y aportar en ataque cuando corresponda para ser preciso en la jugada tirando un buen centro de gol o anotar.
A pesar de no jugar siempre se le ha visto igual de alegre en los entrenamientos ¿Nunca se molestó?
Malhumorado creo que uno pierde. No se trata de conformismo o que me de lo mismo, obviamente que uno sufre pero trato de trabajar con alegría siempre. El peso de la cruz que se carga solo lo conoce uno y su familia, pero tengo claro que si tomara esto con rabia me podría lesionar entrenado o a un compañero. En un equipo pueden estar solamente once jugadores y en el caso de nosotros los defensas es más jodido porque se hacen pocos cambios en esa posición.
¿La competencia en el equipo es pareja?
La competencia es dura y a la vez compleja porque solo jugamos un campeonato. Si a lo mejor estuviéramos en Copa tendríamos la posibilidad de jugar más seguido todos. El profe fue muy claro con nosotros al inicio del semestre para que todos diéramos lo mejor y supiéramos manejar estas situaciones. El otro semestre si vamos a tener la posibilidad de jugar tres torneos y ahí se rotará más el equipo, por eso es importante estar en el mejor nivel para dar la pelea.
¿En qué nivel está si le toca jugar ante Chicó?
Si me toca jugar espero estar a la altura de lo que es el equipo y del nivel que siempre he mostrado. A la edad que tengo no puedo pretender mostrar nada porque ya todo el mundo conoce de lo que soy capaz. A veces las personas me preguntan que si estoy lesionado porque no me ven jugar, pero soy muy claro y sé que David (Murillo) ha hecho un muy buen trabajo y es una muy buena competencia para mí. Es un tipo joven, le pega bien y tiene gran personalidad. En algún momento yo tendré que irme de acá y gracias a Dios ese puesto con él queda bien cubierto porque, modestia aparte, laterales buenos somos pocos (risas).
¿La baja de Vladimir pesa demasiado?
Vladimir es desequilibrante, es goleador y es nuestro referente en el ataque ahora. En un equipo trabajamos 25 o 30 jugadores, algunos pueden ser más determinantes que otros en algún momento según su posición, pero esperamos que Jorge (Aguirre), Jarlan (Barrera), Yoni (González) o el mismo Roberto (Ovelar) puedan marcar la diferencia para que no se extrañe al Enano (risas).
¿Cómo siente que está el equipo para la recta final?
Hemos hecho un muy buen semestre a pesar que no llegaron ningunos nombres de cartel sino muchachos jóvenes que tienen un gran futuro por delante. No es fácil adaptarse a Barranquilla y a Junior en tan poco tiempo y ellos lo han hecho muy bien. Nosotros queremos volver a estar en la final, pero vamos a ir paso a paso para clasificar y después que vengan los mano a mano para que demostremos nuestra jerarquía haciéndonos fuertes de local y de visitante como lo hemos estado logrando