Con la tranquilidad del deber cumplido el exdefensor barranquillero Ever Salas, campeón con Junior en el 2004, logró devolverle al Atlántico la alegría futbolística al dirigir la selección prejuvenil que se consagró campeona nacional el pasado lunes en el estadio Metropolitano tras vencer 3-0 a Bogotá.
A sus 33 años Salas se sacó la espinita que tenía clavada tras la final perdida el año pasado ante Antioquia, cuando al frente de la selección juvenil cayó 1-0.
Ahora, con la victoria sobre sus hombros, espera ser ratificado en el cargo y seguir preparándose como entrenador para lograr agún día cumplir su sueño: dirigir al Junior.
Hace cinco años que Atlántico no ganaba un título de fútbol, seis en la categoría prejuvenil...
Fue un triunfo que lo estábamos buscando hace rato y en este caso tuvimos la oportunidad de quedarnos con el título. No fue fácil, pero gracias a Dios nos tocó la oportunidad de brindarle esta alegría al departamento.
El año pasado a usted le tocó dirigir la juvenil y perdieron la final ante Antioquia (1-0) ¿Sintió la presión antes de enfrentarse a Bogotá?
Un poco ansiosos, pero con mucha más fe. Teníamos una responsabilidad con todo el departamento y no queríamos quedarles mal. Toda esa gente que nos fue a apoyar nos brindó mucha energía y todo se dio a nuestro favor, jugamos buen fútbol y fuimos contundentes para anotar.
¿Qué se les transmite a estos muchachos que están forjando sus sueños en el fútbol?
Primero se transmite la disciplina como algo fundamental. Los muchachos tienen talento, pero al jugador joven siempre hay que meterle en la cabeza que el fútbol es un estilo de vida y hay que cuidarse.
En el 2001 usted logró consagrarse campeón juvenil con la Selección Atlántico al lado de Macnelly Torres, Lesly Orosco, César Fawcett, Heriberto Velandia, Anderson Díaz, entre otros que luego llegaron a profesionales ¿De esta camada que dirige a quiénes ve jugando?
Primero que todo estos muchachos son un grupo muy bueno y todos tienen posibilidad de lograr su sueño si se esfuerzan. Si me toca destacar a algunos diría que los más adelantados son Cristian Sarmiento (Tromba Paisa), Juan Vidal del Junior, Rony Toledo, FabiánÁngel y Giancarlos Rodríguez (Barranquilla FC) y Carlos Roa de Asefusa. Ojalá estos muchachos puedan seguir triunfando y si es posible que se de en Junior, nuestro equipo del alma.
Usted consiguió salir campeón con el Junior en el 2004 ante Nacional ¿Cómo siguió su carrera profesional?
En Junior estuve del 2002 al 2007, luego en el 2008 pasé a Alianza Petrolera, después me fui a Panamá y luego duré año y medio en Venezuela. Me vine a jugar en el Barranquilla FC hasta el 2012 donde tomé la decisión de ser entrenador.
¿Qué lo llevó a convertirse en entrenador?
Melquisedec Navarro, asistente de Jesús Movilla en el Barranquilla, me preguntó si yo quería ser entrenador y le dije que sí, entonces me dijo: ‘Bueno usted va a ser entrenador, pero de los buenos’, eso me marcó.
¿Dónde se ve en un futuro como técnico?
Sueño con dirigir un equipo profesional, pero espero estar aquí en proceso de juveniles lo necesario para que yo me prepare bien. No tengo fecha ni tiempo establecido, pero si el Señor me ha puesto en este camino es porque tengo la capacidad y ojalá que sea muy pronto. Yo cuando inicié esta profesión me dije: a los 38 o 40 años tengo que estar dirigiendo a mi Junior de Barranquila, ya tengo 33 así que vamos a ver.
¿Se fija en algún técnico en particular a quien admire?
Yo hablo de los entrenadores que tuve. Me marcaron tres: Julio Comesaña, por su disciplina; Jorge Luis Pinto, por su trabajo; y Lucho Grau, por su sentido de pertenencia.
¿Y Le gusta el trabajo de Alexis Mendoza en Junior?
Alexis es un señor trabajador, que se ha entregado a esta profesión y ahí se están viendo sus frutos. Con muy poco ha alcanzado unos números excepcionales aquí y ojalá le siga yendo muy bien porque es un técnico serio, con mucho trabajo y responsable.