El bicampeón desató la locura en Barranquilla

Alrededor de las 10:30 a. m. de ayer el bicampeón de Colombia llegó ayer a Barranquilla. Jugadores y cuerpo técnico de Junior aterrizaron en el aeropuerto Ernesto Cortissoz para celebrar con su hinchada la obtención de la novena estrella el miércoles pasado tras derrotar a Deportivo Pasto en el estadio El Campín de Bogotá.

Muchos hinchas que empezaron la celebración apenas el sincelejano Ray Vanegas desperdició el penal, pasaron la noche en vela esperando a los reyes del fútbol colombiano.

Pero finalmente este jueves en la mañana el avión que traía a jugadores y cuerpo técnico arribó a la capital del Atlántico y la locura se apoderó de una parte de la ciudad, por donde estaba previsto que iba a pasar la caravana de los campeones, que terminó su recorrido en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez.

Apenas se bajaron del avión se montaron en un camión de bomberos que los estaba esperando desde tempranas horas. Luego vino el recorrido y la locura de miles de aficionados tiburones.

En carros, motos, colectivos, a pie, de cualquier forma a medida que avanzaba la caravana más personas se unían para recibir con los brazos abiertos a sus campeones.

En el frente del camión iban liderando el combo Sebastián Viera, Teófilo Gutiérrez y el alcalde de Barranquilla, Alejandro Char, uno de hinchas más fervorosos del cuadro Tiburón.

El resto del grupo iba sentado en el camión saludando a los seguidores y grabando con sus celulares y transmitiendo en vivo para sus cuentas de redes sociales.

Champeta y rumba en el Metro

En pleno jueves la rumba se prendió en el Metropolitano. Algunos no se quisieron perder el recibimiento, se volaron del trabajo y ayer gozaron con la fiesta que se montó con los jugadores en el escenario deportivo.

Y fue la fiesta. Primero Teófilo Gutiérrez fue el que se atrevió a mostrar sus habilidades para bailar champeta.

Y claro, Luis Narváez, que durante el semestre cada vez que le tocó dio el paso al frente para cobrar los penales, tampoco se arrugó en la pista y empezó a sacar sus dotes de bailarín.

Primero bailó solo, luego con la reina del Carnaval de Barranquilla 2019, Carolina Segebre y terminó en un dúo con mucho ritmo con el soledeño Leiner Escalante.

Finalmente le tocó el turno a Viera, quien primero se rehusó a bailar, pero terminó sacando unos pases exclusivos, incluso uno similar a la forma en que lo había mandado a callar Ray Vanegas segundos antes de errar el penal.

Cuando el charrúa hizo el mismo gesto con el dedo índice, la afición estalló en júbilo. Fue el broche de oro para otro momento histórico entre afición y equipo.

‘Queremos ganar mucho más’

“Este grupo siempre quiere más, es un placer jugar en este equipo. Ponerle otra estrella al escudo es muy importante. Lindo es recibir el cariño de la gente. Por el esfuerzo que hace uno en la cancha esto se recibe con amor y esta institución es grande. Ver a los niños que van a las escuelas, la gente que sale en silla ruedas y a esperar al Junior tu papá, es emocionante. La verdad esto es sinónimo de alegría y saber que la gente ama esta institución y yo también”, sostuvo ayer Teófilo mientras hacia su ingreso al estadio Metropolitano Roberto Meléndez para festejar el noveno título de Liga con la afición rojiblanca.

Teo está contento con la novena estrella, pero quiere más. Su mayor deseo es ver al Junior triunfando internacionalmente y trabajará para cumplir con ese propósito. “Esta camiseta queremos hacerla más grande. Nos vamos a preparar para lograr más cosas. Hemos quedado en la historia de Junior y ahora a disfrutar. Sin duda que esto es algo inolvidable, queremos seguir por ese camino victorioso. Esta institución quiere seguir creciendo. Ojalá le podamos poner una o dos estrellas más a este escudo”, agregó.